Los impulsores de la marca de calidad Segolechal esperan que los lechazos segovianos se conviertan en el producto alimenticio de referencia de toda la provincia y confían en comercializar en torno a 50.000 corderos durante 2010.
Así lo anunció anoche en la presentación oficial de la marca el presidente de la asociación, Fernando Domingo, quien mostró su deseo de integrarse en la marca Tierra de Sabor, promovida por la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta.
En un acto celebrado en la localidad de Torrecaballeros, incluida en la conocida como ruta del cordero, los promotores presentaron la nueva imagen de la marca en la que se agrupan ganaderos, comercializadores, mataderos y restauradores. El nuevo logotipo se utilizará para identificar los lechazos que se vendan y que diferencien los acogidos a esta marca, frente de los procedentes de otras regiones o países incluso.
Además de la presentación del logotipo se tributaron sendos homenaje a tres personas vinculadas al mundo del lechazo asado y la ganadería ovina, como el veterano esquilador a tijera, Geminiano Herranz´, de Abades; al asador de Sepúlveda Martín Antoranz Tinín; y la asadora Rosario Jiménez, que ha trabajado durante más de 23 años en los hornos de El Rancho de la Aldegüela, de Torrecaballeros.
El hostelero y miembro del comité asesor de la marca, Javier Giráldez, también recordó a algunos personajes importantes en la difusión del cordero asado, como Pedro Altares, Cándido Segovia y Juan Caballero.
Con la presencia de diversas autoridades provinciales y representantes de los sectores ganaderos y económicos, la gala estuvo dirigida por el folclorista Fernando Ortiz, quien se refirió a múltiples implicaciones artísticas, musicales, religiosas, literarias y arquitectónicas, y citó la relación histórica del cordero con las diversas culturas. Cerró con el popular ‘Romance de la loba parda’.