Alfonso Reguera (Segovia, 1956). Vivió en Segovia hasta los 25 años, cuando, al «fichar» por la Caja, se tuvo que trasladar a Cuéllar. Allí conoció a la que hoy es su mujer y allí es donde nacieron sus dos hijas. Casi 30 años de su vida los ha dedicado a trabajar en la entidad financiera, siendo director de varias sucursales, en zonas urbanas y rurales, como en Cuéllar y en la comarca de El Carracillo. Hace unos 13 años regresó a Segovia y su última responsabilidad fue la de director de la sucursal de la Plaza de San Facundo. Coincidiendo con el proceso de integración en Bankia se prejubiló de la entidad. Y volvió a la juventud, según ha comentado, porque, integrado en el equipo del alcalde Pedro Arahuetes, volvió al mundo de la política, la misma que le apasionó en sus tiempos más jóvenes, cuando fue miembro de Juventudes Socialistas.
Pregunta.— Pronto cumplirá un año de trabajo en el Ayuntamiento. ¿Qué balance hace de su estreno en la política municipal?
Respuesta.— Ha sido un año de adaptación. En tráfico y sanciones hemos intentado mecanizar la tarea al máximo posible para ahorrar tiempos de trabajo, evitar posibles errores y garantizar eficiencia y efectividad al ciudadano. Solo un ejemplo. A través de la página web del Ayuntamiento, los hoteles ya pueden introducir los datos de clientes que deben atravesar con su vehículo la Plaza Mayor, donde el acceso está regulado por cámaras de lectura de matrículas. Se incorporan a la ‘lista blanca’ como autorizados de forma provisional. En cuanto a los autobuses urbanos, hemos logrado solucionar, en gran medida, el gran conflicto que había con los transportes a la estación del AVE.
Y en Policía Local el proyecto pasa por una policía afable, protectora de la sociedad, no la penalizadora. La policía Local trabaja en la seguridad de los segovianos y este proyecto, que es un poco mío, particular, es que esa relación entre el policía y el ciudadano sea fluída y que no haya ciudadanos que digan que se les pone una multa, admitan que con razón, pero que digan también que el policía les regaña o que el trato no es bueno. El policía debe tratar al ciudadano como le gustaría que le trataran a el, y los agentes lo han entendido perfectamente.
P.—Todas las responsabilidades que asume afectan de forma muy directa al ciudadano. Sea el transporte, los impuestos, la gestión de la Policía…
R.— Eso es bueno porque te mantiene con las orejas de punta (se ríe) y en alerta continua. Por las circunstancias económicas del momento, en el área de economía, y hablamos de presupuestos, llevamos ocho meses en una situación de impas. En este mes va a ser complicado presentar el presupuesto municipal, porque la Junta de Castilla y León aún no ha presentado su programa económico. Creo que el mes que viene, mayo, va a ser el de presupuestos.
P.—El Ayuntamiento ya dispone de un Plan de Seguridad Vial. Este diario ya anticipó alguno de los datos de ese plan, que detectó excesos de velocidad, y conductas imprudentes por parte conductores y peatones. ¿Cuáles serían las conclusiones?
R.— Segovia no tiene una situación especialmente conflictiva en cuanto a seguridad vial. Los datos que tenemos comparativos con otras ciudades o con los de la DGT son abrumadoramente a favor nuestro. Tenemos registrados algo más de 700 accidentes en 2011, unos 50 atropellos… lo cierto es que solamente entre el 14 y el 20% de los accidentes generan víctimas. Y de estas víctimas, se registran uno o dos fallecidos al cabo del año. El número de fallecidos por atropellos a nivel nacional ronda el 50%. En Segovia se sitúan entre el 2 y el 5%. Segovia no tiene grandes vías interurbanas que tengan grandes velocidades…
Lo que queremos es influir sobre esta situación para mejorar. Por eso se instaló, a modo de ensayo, una cámara de “punto rojo” —junto a la gasolinera del hotel los Arcos — que se activa cuando el semáforo se ponía en rojo para detectar y fotografiar a los vehículos que no respetaban la prohibición de paso. La cámara ha confirmado que los conductores se saltaban este semáforo de forma habitual, en torno a 35 incidencias diarias.
Ahora, el Plan de Seguridad Vial detecta una serie de infracciones continuas, como que en todas las entradas a la ciudad, de forma habitual, los conductores se saltan las limitaciones de velocidad. Hay dos puntos donde los índices son mayores, que son la entrada por la carretera de La Granja, hasta la avenida de Padre Claret, donde más del 80% de los vehículos se saltan la limitación de velocidad. Ya lo sabíamos, porque nosotros con los radares móviles teníamos registrada esta incidencia. En la Cuesta de los Hoyos no respetan los límites de velocidad el 96% de los vehículos. En algunos de los tramos la limitación es a 20 km/h. Quizá aquí es excesivamente baja la limitación de velocidad y se puede subir la velocidad permitida, pero obligando a respetarla, con algún sistema de medición o de penalización. Estamos en ello.
El Plan ofrece un diagnóstico que coincide con una serie de datos e informes que tenemos. Lo que sí que sabemos es que en el 90% de los accidentes que se registran en Segovia la causa fundamental es que nos saltamos la norma de circulación. Bien por ir más deprisa, por no tener claro, por parte de los conductores, quien tiene la prioridad en las rotondas.. bien porque el peatón cruza por donde no debe o no mira antes….