El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente anunció ayer la puesta en servicio del primer tramo del Camino Natural Vía Verde del Valle de Eresma, en Segovia; que discurre entre la capital y la antigua estación de Yanguas de Eresma-Carbonero el Mayor, con una longitud de 24,5 kilómetros y una inversión de 615.254,23 euros.
La primera fase comenzó a ejecutarse el 17 de noviembre de 2012, se dio por terminada el pasado 30 de noviembre y el pasado 30 de enero ya fue inaugurada de manera oficial por la directora general de Desarrollo Rural y Política Forestal, Begoña Nieto. “Con estas iniciativas recuperamos infraestructuras que ya existen dentro del Programa de Caminos Rurales que tiene en marcha el Ministerio desde 1993, ya sea una vía del ferrocarril en desuso, como en este caso, o vías pecuarias y caminos que se han abandonado”, recordó entonces en declaraciones recogidas por Ical, junto al puente sobre el Eresma de la vieja estación de Yanguas.
En ese punto terminan los 24,5 kilómetros del primer tramo. Un itinerario en el que se han acondicionado las intersecciones y creado áreas de descanso, además de reparar infraestructuras como los túneles de Perogordo y Ahusín y el puente de Lobones sobre el río Eresma; también se han limpiado las obras de drenaje existentes y se han ejecutado otras nuevas.
El Ministerio también inició ya la segunda fase de obras de este camino natural, entre Yanguas de Eresma y Nava de la Asunción. Una ruta de 23,5 kilómetros cuyos trabajos supondrán una inversión del Ministerio de 646.000 euros.
Caminantes y ciclistas
Entre las actuaciones necesarias para la recuperación del antiguo trazado ferroviario, para uso de caminantes y ciclistas, se incluye el acondicionamiento de la plataforma y ejecución del firme, obras de drenaje, señalización, mobiliario y elementos de protección. En este segundo tramo destaca la rehabilitación y acondicionamiento del puente del Eresma, sobre el río del mismo nombre; mide 75 metros y se prevé la reparación y limpieza del tablero metálico y la instalación del entablonado de madera para permitir el paso de los usuarios del camino, con los correspondientes elementos de protección.
“Este proyecto ofrece al usuario nuevas posibilidades de ocio y una forma de turismo alternativa y respetuosa con el entorno, educación ambiental e interpretación de la naturaleza”, señalaron fuentes del Magrama en un comunicado. “Promociona también una herramienta para el ejercicio de actividades educativas y culturales que ayudan a una mayor integración y mejor conocimiento del entorno”.
