España ha pedido a la Comisión Europea que adelante los pagos directos de la Política Agrícola Común antes de diciembre para que los agricultores puedan hacer frente a los daños. El comisario del ramo aseguró que dará una respuesta cuando los servicios analicen y den el visto bueno a la propuesta que tendrá que presentar de manera formal la delegación española. Si consideran que “está justificado”, las ayudas podrían estar listas “a partir del 16 de octubre”.
España espera que se pueda adelantar los 5.500 millones de euros que perciben los agricultores al año en forma de pagos directos. El comisario aseguró que la Comisión “utilizará todos los elementos a su disposición” para respaldar a España, Portugal y a otros estados miembros que sufren por la sequía. Recordó que podrían movilizarse a medio plazo fondos de los programas de desarrollo rural con el objetivo de “recuperar la capacidad de producción” cuando se ve afectada por catástrofes naturales como la actual.
Por otra parte, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y las principales organizaciones agrarias acordaron, durante la Mesa de la Sequía en Madrid, la creación de un grupo de trabajo para analizar las medidas que será necesario implementar para hacer frente a la escasez de agua. Ambas partes se dieron un plazo de una semana para poner en común las posibles soluciones.
El subsecretario de Estado de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Jaime Haddad, mantuvo hoy el primer encuentro de la Mesa de la Sequía junto a las principales organizaciones agrarias mientras el ministro, Miguel Arias Cañete, exponía en Bruselas las necesidades del campo español para hacer frente a la sequía.
«Espero que en esta semana consigamos llegar a una definición de medidas que sean bien recibidas por los sectores afectados», señaló Haddad en declaraciones a la prensa para esta primera reunión, al mismo tiempo que desatacó que cualquier decisión que se tome tendrá en cuenta las limitaciones presupuestarias impuestas por la actual coyuntura económica.
El secretario general de la COAG, Miguel Blanco, destacó que hay dos sectores afectados por la falta de lluvias: la ganadería extensiva, con pérdidas que podrían llegar ya a los 500 millones de euros, y los cereales, con pérdidas que llegarían a los 1.000 millones de euros.
