Estos días han dado comienzo los trabajos de construcción de la nueva estación depuradora de aguas residuales (EDAR) del municipio, que fueron adjudicadas por el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) a través de Acuaes el pasado mes de mayo.
Financiadas por la Unión Europea, la construcción de la depuradora forma parte de un convenio firmado hace unos años, que incluía a siete localidades de la provincia las cuales no disponen de sistema de tratamiento de sus aguas residuales, y que desde la Unión Europea empieza a ser obligatorio, en un proceso gradual que comenzó con los municipios de mayor tamaño.
Con una inversión de 756.296 euros, la obra tiene un plazo de ejecución de diez meses, por lo que se espera que pueda estar finalizada a mediados del próximo año.
Aparte de Cabezuela, se llevarán a cabo obras similares en los municipios de Ortigosa del Monte, Prádena, Santa María la Real de Nieva, Villaverde de Íscar y Zarzuela del Monte.
Acuaes —empresa estatal perteneciente al Ministerio— recibió 33 ofertas para la ejecución de las obras que permitirán mejorar el saneamiento de las aguas residuales de estos pueblos. Su presupuesto de licitación fue de 7,2 millones de euros, financiados en un 80 por ciento por el Ministerio, a través de Acuaes con el auxilio del Fondo de Cohesión de la Unión Europea, y en el 20 por ciento restante por los Ayuntamientos beneficiados. Finalmente, el pasado mes de mayo adjudicó, por 4,3 millones de euros, el conjunto de obras a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Elecnor, S. A. – Audeca S. L. U. y Gestión Integral de Aguas, S. L.U.
En el caso de Cabezuela, los trabajos no han precisado de expropiaciones dado que su construcción se lleva a cabo en terrenos municipales, en la zona conocida como Los Prados, cerca del cementerio municipal. La nueva infraestructura tendrá capacidad para el tratamiento de las aguas residuales equivalentes a un volumen demográfico de mil habitantes.
La alcaldesa de Cabezuela, Ana Agudíez (PSOE), destacó la importancia que tiene esta intervención desde el punto de vista medioambiental “porque supone una mejora en la calidad del agua y beneficios para el entorno de toda la zona”. También recordó que desde la Unión Europea se impone la construcción de este tipo de infraestructuras y que los ayuntamientos que se adhirieron al actual convenio estuvieron negociando durante mucho tiempo con el Ministerio una serie de condiciones para conseguir que la inversión no resultara demasiado gravosa para los vecinos.