Las protestas contra el cambio climático no son nuevas. Desde que se instituyó el Día de la Tierra en Estados Unidos, en 1970, los grupos ambientalistas que luchan por un cambio de mentalidad y de políticas ambientales se han multiplicado.
Sin embargo, más allá de algunos cambios, la crisis climática continúa porque muchas empresas y gobiernos se niegan a implantar políticas que en verdad contrarresten los excesos de las revoluciones industriales. Ante esto, muchos grupos se han radicalizado.
Just Stop Oil: la organización de Reino Unido
Lo han definido como un grupo tanto de activismo climático como de vandalismo, pues una de sus estrategias más emblemáticas es la realización de actos vandálicos contra obras de arte, especialmente pinturas, en conocidos museos. Este grupo de fundó en febrero de 2022.
Por ejemplo, han llevado a cabo estas acciones en la National Gallery de Londres, cuando vertieron sopa de tomate en el cuadro Los girasoles, de Vincent Van Gogh, o puré de patatas en La maja vestida y La maja desnuda, de Goya, en el Museo del Prado.
También cierran calles, como el conocidísimo cruce de Abbey Road, en Londres.
Just Stop Oil es un conjunto de grupos que decidieron juntarse para conseguir que el gobierno de Reino Unido se comprometa a parar la producción de combustibles fósiles y sus consiguientes nuevas licencias.
Entre estos grupos destacan Insulate Britain y Extinction Rebellion, cuyos líderes organizan acciones disruptivas que llaman la atención del público. Hay que mencionar que las obras de arte están protegidas, y solo manchan el cristal.
Delito, juicio y sentencia
Louise Lancaster es una de las activistas de Just Stop Oil. El 7 de noviembre de 2022, el grupo bloqueó la M25, la carretera que circunda a Londres, lo cual generó un embotellamiento gigantesco que, según la fiscalía, causó más de 50.000 horas de retraso de vehículos.
En el juicio, que duró dos semanas y media, el jurado por unanimidad declaró al grupo culpable de “conspiración para causar molestias públicas, según la Ley de Policía, Delitos, Sentencias y Tribunales de 2022, bajo la Ley de Derecho Penal de 1977.
Y 7 días después, el juez Christopher Hehir los sentenció a las penas más largas de Reino Unido por protestas no violentas. El líder, Roger Hallam, recibió la sentencia más rigurosa: 5 años. Y el resto, Daniel Shaw, Lucia Whittaker De Abreu, Cressida Gethin y Louise Lancaster, se ganaron 4 años en prisión.
El diario de Louise Lancaster
Lancaster está presa desde finales de 2022, primero en una cárcel de Middlesex (HMP Bronzefiel), como prisión preventiva mientras esperaba la sentencia, y luego en HMP Send, en Surrey. Actualmente tiene 58 años.
Desde allí escribió un diario, publicado por el diario británico The Guardian, sobre sus experiencias tanto del juicio como de la vida en la cárcel, que cubrió un periodo de seis meses, de julio a diciembre de 2024.
En esta entrevista la ex activista cuenta las vicisitudes de las prisiones del Reino Unido, donde cohabitan mujeres que esperan juicio por consumo de drogas, por tráfico de sustancias, robo o delitos menores. Y todo ello con un mínimo porcentaje de crímenes violentos.
También describe las actividades cotidianas, desde levantarse, tomar una ducha y desayunar un plato de cereal o dos tostadas hasta las labores en el invernadero del penal, donde siembran y cosechan diversas hortalizas.
Tales tareas le han servido para mantener el foco y el ánimo, y no caer en la depresión por pasar lejos de la familia fechas importantes, como los cumpleaños o la navidad.
El 29 de enero de 2025 se introdujo una apelación de la sentencia, pues los abogados defensores, que actúan en nombre de los 5 activistas, consideran que las condenas han sido excesivas.