Al margen de toda especulación, solo una persona conoce, en teoría, el número exacto. Es el notario José María Olmos Clavijo, a quien el alcalde, Pedro Arahuetes, entregó en la mañana de ayer las firmas recogidas por el Ayuntamiento de Segovia a lo largo de 17 días, del 21 de junio al 7 de julio, para instar a la Diputación Provincial y a la Junta de Castilla y León a que no financien, con dinero público, la construcción del Palacio de Congresos de Segovia en «La Faisanera», en el complejo Segovia 21, la antigua finca de Quitapesares.
Arahuetes, según informó el Gabinete de Alcaldía, recibirá a primera hora de hoy martes el acta notarial donde se reseñará el número total de firmas depositadas. A las doce del mediodía de hoy, en conferencia de prensa, el alcalde desvelará el número de rúbricas recopiladas, una cifra que supone toda una incógnita. Arahuetes ha eludido estos días ofrecer un número, ni siquiera aproximado, y los miembros del equipo de Gobierno son una tumba. El ‘rumor’ más extendido es que los promotores de la campaña están ‘abrumados’ por el éxito de respuesta y fuentes consultadas apuntan que el número de firmas podría superar las 10.000. El alcalde tan solo ha avanzado que «el dato real va a ser sorprendente».
En todo caso, con independencia de la cifra final, la Diputación Provincial no piensa rectificar en su propósito de transformar la casa-club del campo de golf de «La Faisanera», en Palazuelos de Eresma, en el Palacio de Congresos de Segovia. El propio presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, en una entrevista concedida ayer a los micrófonos del programa «Hoy por Hoy» de Radio Segovia (SER), ya avisó que esta campaña emprendida por el Gobierno municipal socialista no iba a cambiar el rumbo del proyecto capitaneado por la institución provincial. «La decisión ya está tomada», dijo Vázquez, quien llegó a avanzar que el Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León podría anunciar el próximo jueves la aportación de la administración regional, por importe de ocho millones de euros, al futuro Palacio de Congresos de Segovia.
Como fuere, el alcalde ha acudido a un notario para presentar ante la Diputación y la Junta un documento notarial que acredite la cifra de rúbricas recogidas, pero sin que aparezca el nombre y apellidos de los firmantes. Con esta medida, según avanzó hace unos días el propio Arahuetes, se pretendía evitar «que pudiera haber represalias» por parte del PP contra quienes no comulguen con el proyecto del Palacio de Congresos en Segovia 21. Arahuetes ha señalado estos días que conoce a ciudadanos que habían sido informados del presunto propósito del PP de revisar los nombres de las personas que estampen su firma contra el proyecto en «La Faisanera».
El alcalde puso en marcha la recogida de firmas después que el juzgado prohibiera la celebración de una ‘consulta popular’. La insólita celeridad de la justicia para anular su iniciativa y la suma de esfuerzos para impugnar la consulta por parte de la Delegación del Gobierno, la Subdelegación, la Abogacía del Estado y el PP «dio alas» al alcalde, según confesó el propio Arahuetes. El Juzgado suspendió la consulta al entender que la iniciativa debe regularse en función del artículo 71 de La Ley de Bases de Régimen Local, que exige, entre otros requisitos, un acuerdo de pleno y la autorización del Gobierno de España. Arahuetes contraatacó con esta campaña de recogida de firmas, que hoy desvelará su resultado.
