Los responsables de Embutidos Rodríguez lanzaron un mensaje de “tranquilidad” a sus empleados, colaboradores, clientes y proveedores, y aseguró en un comunicado que “con su ayuda” se van a “reducir las negativas consecuencias de este incendio” y que su objetivo es “que no se pierda ni un solo puesto de trabajo”.
Así, la dirección dijo que “aún es pronto” para conocer el alcance real de los daños, pero que la realidad es que los efectos del fuego sobre las instalaciones de la factoría fueron “notables” y que “irremediablemente afectarán a la actividad a corto plazo”.
No obstante, manifestaron su “total y absoluto compromiso” en reiniciar la construcción de las instalaciones afectadas “en el menor plazo posible, con el único fin de garantizar el nivel de actividad que la empresa ha mantenido hasta la fecha” y con los mismos niveles de calidad en sus productos.
Por último, la parte empresarial agradecieron a los servicios de extinción de incendios y a los voluntarios su profesionalidad y “excelente trabajo” que “ha contribuido a que los daños acaecidos no hayan sido superiores”. También mostró su gratitud con las distintas administraciones locales, provinciales y autonómicas por su apoyo tras el siniestro.
El equipo de incendios de la Guardia Civil se incorporó ayer a las labores de investigación del incendio de la fábrica de Embutidos Rodríguez. Este equipo especializado de la Guardia Civil se ocupa de la investigación de los incendios estructurales, en viviendas, naves o vehículos, entre otros, y tiene su ámbito de actuación en la Comunidad de Castilla y León y en el Principado de Asturias.
Por su parte, la Junta creará una Comisión de urgencia con el fin de abordar el levantamiento de la planta de Embutidos Rodríguez en Soto de la Vega (León), arrasada por las llamas, y atender las necesidades de los 280 trabajadores afectados.
Así lo anunció la consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, quien se desplazó el mismo día del incendio hasta Soto de la Vega. El Ejecutivo autonómico, que está “del lado de los trabajadores”, buscará soluciones en función de la situación previa que tuvieran (hay muchos autónomos) y una vez conocidos los daños y la situación. “Habrá un análisis, un estudio y una respuesta para que puedan seguir viviendo como corresponde”, recalcó.
En lo que tiene que ver con la empresa, se estudiarán alternativas para que las líneas de mercado hoy abiertas se mantengan durante el proceso de construcción de la nueva planta y se buscará recabar el apoyo de otros empresarios también del sector para garantizar la actividad y la colocación del producto dada la “importancia” de mantener las líneas de comercialización “para evitar que se reduzca la facturación”, cifrada en 120 millones.
La consejera apuntó al “liderazgo empresarial, el compromiso social” y el “apoyo especial” de la Junta en estas situaciones “desgraciadas” para poner en marcha nuevamente la actividad en la fábrica, recuperar los puestos de trabajo y mantener en La Bañeza los 120 millones de facturación. Marcos sí puntualizó que las ayudas para levantar la empresa están siempre vinculadas a la garantía del empleo de los trabajadores.
