A poco más de una semana de la jornada electoral del 28-M, los partidos apuran los últimos días para lanzar sus mensajes que puedan convencer a los posibles indecisos y que pueden hacer cambiar el sentido el voto y el resultado final de unos comicios que se caracterizan por ser los de mayor participación ciudadana.
En las elecciones de 2019, la participación fue del 75 por ciento aproximadamente. Son las municipales las que atraen más votantes a los colegios electorales. En este caso en Castilla y León no se convocan elecciones autonómicas como en otras comunidades, por lo que sólo habrá urnas para formar corporaciones municipales. Pero eso no parece que vaya a reducir el índice de participación.
Todo pese a que existen más de 60 alcaldías que ya se dan por aseguradas para el PP. Al menos así lo aseguran los dirigentes de este partido. En cualquier caso, existen otras 140 localidades que dependen mucho de los resultados que se obtengan el domingo 28. Por ello los partidos se afanan estos días que quedan de campaña en arañar el máximo de votos.
Entre las incógnitas que se mantienen a día de hoy se encuentra la capital, donde la última encuesta anuncia un cambio de gobierno a favor del PP, que podría alcanzar incluso la mayoría absoluta.
Los líderes de cada uno de los seis partidos que concurren ven con distinta óptica y dan distinto grado de credibilidad al resultado demoscópico según les favorezca o les perjudique.
En esta ocasión concurren seis partidos, pero en la anterior convocatoria fueron ocho, de los que cinco lograron representación. Aún más numeroso fueron las que compitieron en las municipales de 2015: once listas diferentes, de las que también cinco lograron concejales.
POSIBLES SORPRESAS
A diferencia de la capital, no se han encuestas profesionales para el resto de los 207 municipios que también concurren a las elecciones este año, y resulta difícil adivinar cómo quedarán configuradas muchas corporaciones.
El único municipio sin elecciones municipales el día 28 es Cabezuela. Será un domingo con mucho menos ambiente electoral que el tendrán el resto de localidades.
En todo caso, en la mayoría de la provincia se mantienen muchas incógnitas. En las dos últimas legislaturas la irrupción de varias fuerzas políticas crearon inestabilidad en varias corporaciones por no existir mayorías absolutas. Algunas han vivido mociones de censura que han acabado en cambio de alcaldes a lo largo de la legislatura. Ahora puede ocurrir lo mismo en muchas localidades de la provincia en vista del alto número de opciones políticas que concurren.
En Cuéllar han mostrado interés en participar electoralmente seis opciones políticas. La actual corporación de once miembros la preside el socialista Carlos Fraile, quien logró la Alcaldía con el apoyo de IU. Pero a día de hoy no está garantizada ninguna mayoría y podría todo quedar al capricho de las minorías si logran representación todos los partidos: PSOE, PP, IU, Ciudadanos, Vox y Centrados.
Algo parecido ocurre en El Espinar, donde, como en Cuéllar, el pacto de gobierno que dio estabilidad a la Corporación en un principio entre PP y Vox, está roto. El pacto ‘a la andaluza’ que se fraguó pese a ser el PSOE el partido más votado, dio la Alcaldía al popular Javier Figueredo. Los trece concejales que se eligen en la villa espinariega también pueden estar muy divididos si no se consiguen mayorías absolutas. Pero el hecho de que concurran siete listas, puede complicar también la formación de una Corporación si un partido no alcanza una mayoría holgada.
Junto a los partidos tradicionales como PP, PSOE, Vox y Ciudadanos, han presentado listas: EEA (El Espinar Avanza), VNA (Vecinos de Núcleos de El Espinar), y Ahora Sí.
La presencia de muchas formaciones políticas parecía que ser hasta ahora patrimonio de los pueblos de la zona metropolitana de Segovia. Pero en esta ocasión se ha extendido a los pueblos más grandes de la provincia.
En el Real Sitio de San Ildefonso se presentan cuatro listas: PSOE, PP, IU y Vox . Aquí ha ganado tradicionalmente el PSOE que desde la pasada legislatura la encabeza Samuel Alonso. La deuda económica que arrastra el Ayuntamiento no parece hacer mella en sus resultados electorales. Ahora se le añaden noticias negativas sobre la gestión municipal.
Palazuelos de Eresma también ha sido un municipio de mucha concurrencia política. Pero esta vez se han quedado en cinco formaciones: PP, PSOE, Vox, Podemos y Municipio Unido. Este pueblo dormitorio ha conocido alcaldes de muchos colores políticos. Además del actual Jesús Nieto (PP), que gobierna desde 1991 y espera renovar, han gobernado Domingo Asenjo, por IU y por el PSOE; Gabino Herranz, quien curiosamente representaba a un partido nacido del pueblo vecino, San Cristóbal de Segovia; Joaquín González (Independiente); o Pedro Iglesias, con UCD. Todos aspiran a renovar su cargo para una legislatura en la que posiblemente crezca urbanística y demográficamente la localidad.
En el pueblo vecino de San Cristóbal de Segovia resultan más sencillas las apuestas, pues hay tres listas en liza. El PP del actual alcalde, Óscar Moral, que aspira a revalidar el cargo; PSOE y Vox, que presentan caras nuevas en esta ocasión.
Más fácil lo va a tener quien gane en Nava de la Asunción, porque solo compiten dos candidaturas para una Corporación de once ediles: El PSOE del actual alcalde, Juan José Maroto; y la del PP de Ángel Pescador. La lista que resulte el 28 de mayo obtendrá mayoría absoluta y, por tanto, gozará de estabilidad a lo largo de la legislatura.
En la ciudad de Cantalejo, la habitual pugna entre PP y PSOE se amplía ahora con la irrupción de Vox. Esta circunstancia nueva de tres partidos en liza hace recordar a los briqueros más veteranos la situación vivida hace muchos años, cuando fue el partido bisagra, el CDS, con un solo concejal, el que decidió para quién debía ser la Alcaldía. Desde entonces sólo habían vuelto a concurrir PP y PSOE.
Las claves para constituir la Diputación se disputan en el alfoz
Los partidos políticos centran parte de sus esfuerzos en los municipios del entorno de la capital para hacerse con el gobierno provincial que surja tras los comicios municipales
El fuerte peso que tiene el partido judicial de Segovia en la estructura de la Corporación provincial, hace que las formaciones políticas centren gran parte de sus esfuerzos en conseguir el máximo de concejales en los pueblos del área metropolitana de la capital. Actualmente la institución provincial cuenta con 25 diputados provinciales. De ellos, 15 se deciden en el partido judicial de Segovia. Al de Cuéllar corresponden cuatro diputados; tres al de Santa María la Real de Nieva; dos al de Sepúlveda; y uno al de Riaza.
Tras los resultados de las elecciones del domingo 28 de mayo, la fecha clave siguiente será el sábado 17 de junio en que se constituyan los ayuntamientos. Una vez que tengan sus actas de concejales son llamados a votar por la junta electoral de zona de su partido judicial para designar los diputados que les hayan correspondido por cada circunscripción. Posteriormente, los diputados electos votan las candidaturas presentadas para presidir la Diputación en el pleno constituyente de la institución provincial. El candidato más votado es proclamado presidente.
Los resultados electorales de 2019 dieron al PP en el conjunto de la provincia 615 concejales, lo que le reportó 13 diputados, de modo que ostenta mayoría absoluta, una constante que mantiene desde hace ya más de seis legislaturas. Pero las más holgadas fueron las de 2007 y 2011 con quince diputados. El PSOE, con 385 concejales, consiguió diez diputados provinciales. Ciudadanos sumó 37 concejales y por ello mantiene dos diputados. IU obtuvo doce concejales, pero no logró representación en la Diputación, objetivo que no alcanza desde que perdió su escaño provincial en el año 2007.
En la última convocatoria electoral de 2019, la constitución de la Diputación provincial se retrasó porque hubo que resolver algunos recursos judiciales en base a esta representación. En un principio, los resultados daban un diputado a IU. De hecho, la base de datos oficial del Ministerio de la Presidencia mantiene aún el resultado provisional.
Finalmente el diputado le correspondió al PP porque la Junta Electoral consideró que no le correspondía a la formación de izquierdas, porque se presentaban con distintas denominaciones en diversos pueblos, y por tanto entiende que el cómputo de diputados se hace a partidos homogéneos.
Entre los políticos más representativos que han presidido esta institución figura Fernando Abril Martorell, que accedió al cargo en 1969 y fue uno de los padres de la Constitución. Al año siguiente le sucedió Modesto Fraile Poujade (1970). Julio Nieves Borrego (1975), Emilio Zamarriego (1977), Leónides González (1979) y Rafael de las Heras (1979) vivieron momentos convulsos.
En 1987 presidió la institución Javier Reguera García con el PSOE. Y desde 1991, la Presidencia la mantiene el PP con Atilano Soto Rábanos hasta el año 2003, a quien siguió Javier Santamaría Herranz (2003 -2011), Francisco Vázquez Requero (2011-2019), y Miguel Ángel de Vicente, desde hace cuatro años.
