La población de Castilla y León sólo creció en 2021 en el grupo de edad de entre 65 años y más, que se sumó a esa franja 8.590 efectivos, hasta 622.101, según los datos definitivos de Padrón a 1 de enero de 2022 publicados por el INE. Por el contrario, el grupo de entre 16 y 64 años mermó en 12.732, con 1.459.876; y el de 0 a 15 años, en 6.375, con 290.663. La edad media se situó en la Comunidad en 48,24 años, frente a los 47,95 de un año antes.
La Comunidad de Castilla y León encabezó la pérdida de habitantes en 2021 en términos absolutos, 10.499, hasta los 2.372.640 registrados en el Padrón, seguida de Asturias, que vio desaparecer a 7.106 personas. La autonomía asturiana, sin embargo, sufrió una mayor pérdida porcentual de habitantes, un 0,7 por ciento, seguida en este dato por la castellana y leonesa, que vio mermar un 0,4 por ciento el número de ciudadanos. En el conjunto nacional, por el contrario, la población creció un 0,2 por ciento, hasta los 47.475.420 habitantes.
Otras cinco autonomías más redujeron su población, Extremadura y Castilla-La Mancha, un 0,4 por ciento en ambos casos, hasta 1.054.776 y 2.053.328 habitantes, respectivamente; País Vasco, un 0,3 por ciento, con 2.208.174; Galicia, un 0,2 por ciento y 2.690.464; y Madrid, donde se redujo sólo en 915, menos de una décima, hasta los 6.750.336
Por el contrario, Valencia ganó 39.829 habitantes, hasta 5.097.967; Cataluña, 29.249, con 7.792.611; y Andalucía, 27.780, para llegar al 1 de enero de 2022, con 8.500.187, con subidas del 0,8, 0,4 y 0,3 por ciento, respectivamente. En términos relativos, fue Murcia la autonomía que más creció, con un 0,9 por ciento, y sumó 13.392 ciudadanos, hasta 1.531,878,.
Castilla y León contaba a 1 de enero de 2022, con 1.167.883 hombres, y 1.204.757 mujeres, ambos sexos mermaron un 0,4 por ciento, con 5.231 varones menos, y la pérdida de 5.268 féminas.
