Si algo te permite comprobar de forma directa la opinión de la ciudadanía es la oportunidad de compartir sus actividades, sus tradiciones, sus encuentros, en resumen acercarte a su espacio físico. Resido en la provincia, aunque tenga que viajar continuamente a Madrid para cumplir mis obligaciones parlamentarias (me sorprende quien da lecciones de segovianismo o medidas para esta tierra pero viven fuera). Nunca he dudado en participar a lo largo y ancho de la provincia en los eventos que se celebran, en escuchar cuando te reclaman a los alcaldes, concejales, asociaciones o ciudadanía en general y por ello en los últimos días, en ese ejercicio de “escucha activa con cercanía” he testado un número interesante de opiniones sobre los momentos que vivimos.
Respetando siempre las opiniones, he podido comprobar el hartazgo de la ciudadanía a la falta de acuerdo cuando en tiempos complicados el Gobierno (del signo que sea) pone encima de la mesa medidas para ayudar en la mejora de la situación que hemos vivido por la pandemia y ahora por los efectos de la invasión de Putin en Ucrania y no se apoyan o al menos no se vota en contra. ”Si Pedro Sánchez propone una rebaja de 20 céntimos en el precio de los combustibles, el PP y la ultraderecha votan en contra, pero después se aprovechan de ello con cinismo”, me decía una mujer el pasado fin de semana.
También el sector primario me trasladaba estos días, su preocupación por la subida de precios de los combustibles y las materias primas, fertilizantes, el calor extremo (efectos del cambio climático) que ha mermado la cosecha de cereal, etc. Pero reconocían que las ayudas directas del Gobierno de España al sector lácteo son un alivio, aunque el Gobierno popular-franquista de la Junta, ya no va a hacerse fotos o utilizar a los agricultores y ganaderos y no les está ayudando de ninguna manera en estas difíciles circunstancias. Solo utilización en campaña y después pasotismo.
Pero confieso que cuando comprobamos las estrategias de la confusión y la desinformación que utilizan la derecha y la ultraderecha de Vox (los amigos de Putin) para evitar que la gente valore con calma qué gobierno toma medidas y de qué manera les ayuda, es necesario redoblar esfuerzos de pedagogía. Por ello, me pregunto que hará mañana jueves el PP y la ultraderecha de Vox cuando en el Congreso votemos la “excepción ibérica” que permitirá topar el precio del gas y rebajar la factura de la luz. O qué votará en la nueva ley de telecomunicaciones o con la eliminación del voto rogado para terminar con los impedimentos para que los españoles en el exterior puedan votar de forma adecuada. ¿tendrán cercanía?
Por cierto, el espectáculo de la llegada de la ultraderecha de Vox al Gobierno de Castilla y León, esta semana tiene otro capítulo, con la dimisión del gerente del ECyL, después de que Vox presentara una moción en el Ayuntamiento de Valladolid para pedir que se eliminara la formación sobre igualdad, cuando el gerente nombrado por Vox había impartido esos cursos y es uno de los propietarios de la empresa que los gestiona. ¿Cuál será la siguiente aparición en la opinión pública de nuestro país del Gobierno popular-franquista en Cyl? Es terrible el cinismo que aplican y la medicina que beben.
Mientras observamos con claridad lo que son, el Gobierno de España aprueba los proyectos de Ley para fijar la aplicación de la nueva PAC, o contra el desperdicio alimentario, así como el plan de lucha contra el abandono escolar. Cercanía a los problemas y aportar soluciones frente al ruido.
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(*) Diputado del PSOE por Segovia.
