En las redes sociales de las cofradías y hermandades segovianas, todas ellas hacían patente su emoción por volver a recuperar la gloria en la calle de sus pasos e imágenes después de años duros de pandemia y mal tiempo que han impedido total o parcialmente llenar las calles con su esplendor. Y el Jueves Santo no defraudó, en una jornada que se recordará como la del apoteosis de la Segovia Cofrade, refrendado por el masivo apoyo de segovianos y visitantes que llenaron el recorrido de las estaciones de penitencia y traslados procesionales de las siete cofradías que procesionaron este jueves por todos los rincones de la ciudad.
Con la mirada siempre puesta en las aplicaciones meteorológicas, pese a que las previsiones anunciaban escasas probabilidades de lluvia, las hermandades y cofradías segovianas dedicaron la mañana del Jueves Santo a adornar tronos y pasos, dar el último toque a capirotes y túnicas, templar cornetas y tambores… en definitiva, a poner todo a punto, porque en el año de la recuperación de las procesiones, nada puede fallar.
La prueba al crisol de la potencia cofrade llegó por la tarde, donde en el orden establecido por la Junta de Cofradías, cada una de ellas emprendía el camino hacia la carrera oficial desde sus parroquias para completar el recorrido penitencial que les lleva hasta la Catedral. Puntualidad, orden y una indisimulada emoción fueron el denominador común de los trayectos cofrades, que como ya es costumbre inició la Cofradía de la Flagelación del Señor desde el barrio de Nueva Segovia, acompañando a su imagen titular en los casi cuatro kilómetros que le separan de la Seo segoviana. Así, a las 18,15 horas el cortejo arrancaba desde la Iglesia de la Resurrección del Señor para en poco más de tres horas llegar a la Catedral. El ‘tráfico’ cofrade les hizo pasar frente a la ermita del Cristo del Mercado, donde la Cofradía de la Esclavitud del Santo Cristo de la Cruz se preparaba para iniciar su estación de penitencia, y el paso fue saludado por los máximos responsables de la cofradía y por el aplauso de las centenares de personas que se congregaban en la Plaza del Cristo del Mercado.
El barrio de San José llevó a cabo también la procesión de sus imágenes titulares -Nuestra Señora de La Piedad, la Magdalena al pie de la Cruz y El Calvario- que partió a las 18,45 desde la iglesia parroquial, donde antes de iniciar la procesión el párroco Juan Cruz Arnanz se dirigió a vecinos y cofrades para invitarles a participar en un ambiente de oración en torno al misterio de la muerte de Cristo, así como a recordar a familiares y amigos perdidos en los dos últimos años por la pandemia. Los claveles blancos de papel elaborados por los vecinos que adornaban el trono de La Piedad eran el símbolo elegido por la cofradía en su recuerdo.
A la misma hora, la explanada de la Iglesia de San Millán volvía a lucir las magníficas imágenes de la Soledad al pie de la Cruz y el Santísimo Cristo en su Última Palabra de Aniceto Marinas con las que procesiona la cofradía que lleva sus nombres, que antes de incorporarse a la carrera oficial en el Azoguejo llevó a cabo un recorrido por el barrio, escoltadas como siempre por agentes del Cuerpo Nacional de Policía.
En la ermita del Cristo del Mercado se vivía uno de los momentos más emotivos del Jueves Santo, con la salida de la imagen titular desde el templo portada a hombros por 24 cargadores de la Cofradía de la Esclavitud del Santo Cristo de la Cruz. El esfuerzo y la precisión de los cargadores para bajar los 15 empinados escalones del templo volvió a ser un año más ejemplo de fervor cofrade que fue largamente aplaudido por los vecinos del barrio, que no quisieron dejar de acompañar a su venerada imagen. Antes de partir, la cofradía quiso también tener un recuerdo emocionado para el sacerdote Domiciano Monjas, muchos años párroco del Cristo, con la lectura de un poema compuesto por él y dedicado al Cristo del Mercado. La cofradía contó con el acompañamiento musical de la banda de cornetas y tambores Coronación de Espinas de Burgos.
La ‘Reina del viejo arrabal segoviano’, la Soledad Dolorosa de Santa Eulalia también se sumó a las estaciones de penitencia de manos de la Hermandad titular, que completó su recorrido mostrando su espectacular palio y la belleza de su rostro no sin antes recorrer las calles del barrio. Del mismo modo la Cofradía de la Oración en el Huerto del barrio de San Lorenzo se incorporó a la carrera oficial desde el arrabal.
La Cofradía de Exalumnos Maristas ADEMar volvió un año más a ofrecer algunas de las imágenes más hermosas de la Semana Santa segoviana con el paso de sus imágenes de Jesús con la Cruz a Cuestas y la Virgen de las Angustias cargadas a banzo y a hombros por los altos de La Piedad con la Catedral en el horizonte, rubricando allí el tradicional ‘Juramento de Silencio’, para después adentrarse en el centro histórico por el arco del Socorro y realizar la ofrenda penitencial frente al convento de las Siervas de María.
Las cofradías completaron su recorrido en torno a la medianoche, y las imágenes quedaron expuestas en el trascoro y las capillas de la Catedral hasta el inicio de la Procesión de los Pasos de hoy, Viernes Santo.
La jornada del Jueves Santo se completó con un hermoso Via Crucis en el barrio de El Salvador organizado por la Real Cofradía de la Santa y Venerable Esclavitud, donde la imagen del Santo Cristo de los Gascones recorrió sus calles para el rezo de las estaciones.
