La selección española dio un nuevo paso hacia las semifinales del Mundial tras imponerse ayer a Noruega gracias a una excepcional actuación del portero Hombrados, que se convirtió en un muro infranqueable para el rival.
El capitán atajó los dos primeros lanzamientos de Kjelling, que en su tercer intento ni tan siquiera acertó con el marco, y el primero de Mamelund, otro de los puntales ofensivos del cuadro noruego.
El arquero del Ciudad Real, que concluyó la primera parte con un 48 por ciento de intervenciones, amargó la existencia a los jugadores noruegos, con paradas y más paradas, que permitieron a España dispararse en el marcador.
Superado el ecuador del primer tiempo, la selección gozaba de una renta de cuatro goles (9-5), que tan solo parecía amenazada por la efectividad del pivote Bjarte Myrhol, máximo anotador de los nórdicos en la primera mitad.
Pero, amparada en la seguridad de Hombrados, ni la actuación de Neckar Lowen fue suficiente para descomponer a la defensa nacional, que poco a poco fue maniatando el juego ofensivo de su rival, aunque no logró traducirlo plenamente en el electrónico, lastrada por sus errores de lanzamiento (15-12).
Estos fallos no desaparecieron por completo en la segunda parte, en la que la ‘roja’ subió un punto más su intensidad defensiva para ahogar a Noruega, que no anotó hasta los siete minutos de la reanudación.
Circunstancia que permitió a España lograr una renta de siete tantos (19-12), que parecía encarrilar casi definitivamente la victoria del combinado que dirige Valero Rivera que, pese a la ventaja, no dejó nunca de presionar.
En los últimos minutos, el cuadro escandinavo, de la mano del lateral Lie Hansen, maquilló ligeramente el marcador y el tanteador final se quedó en cinco goles (32-27) de ventaja para el equipo español, que suma dos valiosos puntos en la lucha por alcanzar las semifinales de un Mundial, en las que España no figura desde 2005.
