La Junta de Castilla y León no contempla “hacer seguidismo” de quien “pone en peligro el futuro de la Comunidad y del Estado del Bienestar”, en alusión a la Generalitat de Cataluña, pero advirtió de que la región “no renunciará” a los ingresos que le corresponden y que el Gobierno de España todavía no ha transferido.
El vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, se refirió así al anuncio del Gobierno catalán de llevar al Ejecutivo central a los tribunales por el impago de los adelantos correspondientes a 2019, una vía que Castilla y León no descarta en un futuro, si bien por el momento no piensa sumarse, al considerar que ello implicaría hacer “seguidismo” a la Generalitat, lo cual no sería “coherente” por parte de la Junta, a su juicio.
En la rueda posterior a la reunión del Consejo de Gobierno celebrada en el día de ayer, Igea indicó que a pesar de este impago, Castilla y León está “menos obligada”, al haber prorrogado sus cuentas, a hacer recortes que “otros” que “sí” aprobaron unas nuevas contando con esos fondos para que después los partidos que sustentan a estos gobiernos autonómicos votaran en contra de los Presupuestos Generales del Estado, los cuales no pudieron salir adelante, y “ahora se quejan”.
Por otro lado, el número dos del Ejecutivo castellanoleonés consideró “urgente” cambiar el actual sistema de financiación autonómica cuanto antes, al tiempo que recordó que el actual fue “pactado a medida” entre un Gobierno socialista y la Generalitat.
Asimismo, el vicepresidente reclamó a todos los partidos de la Comunidad, especialmente al PSOE, a que mantenga la postura acordada el pasado 13 de abril de 2016 para proteger los intereses de la Comunidad en una futura reforma.
Francisco Igea expresó su deseo de que dicha reforma no “imponga un pago” hacia quienes “quieren acabar con la unidad nacional” para conseguir la “permanencia” de Pedro Sánchez al frente del Gobierno de España.
