El Ayuntamiento de Segovia ha emprendido los trabajos de acondicionamiento y mejora del cementerio de Zamarramala. En concreto, las obras permitirán incorporar al recinto los aproximadamente 100 metros cuadrados que en su día ocupó el edificio destinado a osario y sala de autopsias.
En una nota de prensa, el municipio explica que el desuso y el paso del tiempo habían ocasionado el derrumbe de ese viejo inmueble. El espacio se había llenado de escombros y la zona había quedado incomunicada del resto.
Ahora, como han comprobado el concejal de Servicios Sociales, Andrés Torquemada, y la concejala de Obras y Servicios, Paloma Maroto, se ha desescombrado todo el espacio, se ha abierto un nuevo hueco de comunicación hacia el interior del recinto y se ha superado la diferencia de nivel que existe entre ambos terrenos.
Tras su recuperación, esta zona se podrá destinar, en un futuro, a nuevos enterramientos del barrio incorporado, una vez que se haya determinado la forma en la que se deban llevar a cabo para optimizar el espacio con el que se cuenta.
La recuperación de esa área es la intervención más importante que el Ayuntamiento de Segovia va a ejecutar en el cementerio de Zamarramala, pero no la única.
También se van a sanear los bajos de los muros de mampostería, retocar con mortero de cemento blanco y repasar los tejados de los edificios destinados a nichos, así como reparar las coronaciones de los muros, reponiendo las tejas y albardillas.
En esta actuación se ha incluido el arco de acceso al patio en el que en tiempos hubo una pequeña capilla. En él se han llevado a cabo tareas de picado y revocado.
Esta intervención se hacia necesaria debido al estado en el que se encontraba una parte de esta infraestructura municipal, zona que a partir de este momento quedada integrada en el conjunto del cementerio municipal de Zamaramala.