Aranda de Duero se prepara para recibir un agosto de música, humor y vino de la mano de Sonorama Ribera, uno de los festivales de música más importantes del país, que celebra del 9 al 13 de agosto su XXVI edición. Más de 150 artistas participarán en esta nueva edición, que este año busca reducir su aforo, con 3.000 asistentes menos, pero crecer en “calidad”.
Así lo indica su director, Javier Ajenjo, que afirma que el festival se encuentra en un “punto óptimo” en cuanto a la cantidad, y quieren mejorar en otros aspectos como la inclusión, la accesibilidad y la sostenibilidad. “Tenemos muy buena previsión”, asegura Ajenjo.
Sonorama Ribera ya ha colgado el cartel de bonos agotados, con 32.000 vendidos, aunque se continúan vendiendo abonos de día. La organización ultima detalles para la “avalancha” de aficionados de la música que llegarán a Aranda durante la segunda semana de agosto, aunque, con el objetivo de que los asistentes estén “más cómodos”, quieren reducir el aforo este 2023.
Este año, el recinto contará con cinco escenarios, dos escenarios gemelos que serán los principales de esta edición y estarán situados el uno al lado del otro, otros dos escenarios más pequeños que también estarán juntos, con el fin de reducir espacio; y el Escenario Comedia, con monólogos, actuaciones y podcasts en directo.
Sonorama Ribera 2023 dará el pistoletazo de salida el viernes 9 de agosto con artistas como Dillom, Depedro o Veintiuno, y el sonido más pop y alternativo llegará de la mano de Cupido o Jimena Amarillo, entre otros.
