La Gimnástica Segoviana logró el pasado domingo una victoria que le devuelve a la carrera por la permanencia de la que se había descolgado tras las últimas tres derrotas. Los resultados favorecieron los intereses gimnásticos, de eso no hay duda, pero también es indudable que, sin los tres puntos ante el Fabril, hubieran dado lo mismo esos marcadores.
Lo cierto es que la Segoviana, pese a continuar en la penúltima plaza, rebajó a dos puntos la diferencia con el puesto de play out, y a cuatro la permanencia que marca el Valladolid B, por lo que las opciones siguen vigentes, aunque ellas siguen pasando por sumar en la práctica totalidad de los partidos, porque se ha comprobado que los conjuntos de abajo están apretando de tal manera que equipos que equipos que tenían la permanencia prácticamente asegurada como el Guijuelo (cuatro derrotas consecutivas), están viendo ahora cómo el vagón de cola se está acercando a buen paso. Como siempre ha dicho Abraham García, “cuantos más equipos estemos en la pelea, mejor”.
LA PONFERRADINA SE SALVA
De la misma forma que hay escuadras que se están metiendo en problemas clasificatorios, porque al igual que el Guijuelo tanto el Adarve como el Real Madrid Castilla no se pueden relajar, otros han apretado de firme en este tramo de la competición, y prácticamente han dejado atrás de manera definitiva los puestos de descenso. Es el caso de la Ponferradina, que ha sumado once puntos de los últimos quince en juego para convertirse en el conjunto más en forma de la liga, y acercarse a posiciones más acordes con la calidad de su plantel.
Seis jornadas restan para que se acabe la temporada y, salvando el Navalcarnero, los rivales de la Gimnástica Segoviana serán conjuntos que, o bien ya tienen poco que jugarse en la temporada, o son rivales directos por la salvación, por lo que la importancia de esos partidos es aún mayor.
Uno de estos equipos que no llegarán a jugar el play off de ascenso, pero tampoco tendrán problemas para salvar la categoría será el Talavera, próximo rival azulgrana, que quizá tenga como última motivación la de jugar la próxima edición de la Copa del Rey.
Tres desplazamientos cercanos, y otros tres partidos en casa, restan para que
la Segoviana apure sus opciones de salvar la categoría
El siguiente encuentro será ante el Navalcarnero, que pelea por jugar la promoción de ascenso a Segunda, y la siguiente visita azulgrana se realizará al municipal de Guijuelo, donde se medirá a un rival que a esas alturas de la temporada ya sabrá si se ha metido en líos clasificatorios, o si bien ha sumado los puntos suficientes como para salvarse sin agobios.
Las tres últimas jornadas tendrán como protagonistas a Valladolid B y Pontevedra en La Albuera, y Unión Adarve en Madrid. Evidentemente la situación de la Segoviana en la tabla deja claro que la entidad del rival de turno es lo de menos, pero la realidad es que el conjunto gimnástico, con sus aciertos y sus errores, se ha ganado el derecho a soñar con la permanencia a seis jornadas para el final de la temporada.
“Nuestra fuerza está en el grupo. No tenemos a Messi”
Abraham García lanzó varios mensajes al finalizar el encuentro ante el Fabril. El técnico de la Segoviana tenía claro que eran pocos los que creían en la victoria de su equipo al afirmar que “no sé si cuando nos quedamos con diez había alguno que creyera, pero los que tienen que creer son los jugadores y los que estamos ahí dentro”, y por ello apeló de nuevo a los seguidores gimnásticos, “porque era un día para animar nosotros a la gente. Espero que lo hayamos conseguido, porque sin el apoyo de la gente, la Segoviana no se queda en Segunda B con seguridad. Necesitamos de todo el mundo, pero no le voy a pedir nada a nadie de la Sego, porque soy yo quien lo tiene que dar todo”.
El técnico reconoció que la había faltado “brillo” en algunas decisiones de encuentros pasados, pero sí puso en evidencia la máxima con la que llegó a la Segoviana: “Desde que cogí a este equipo, he pensado que la fuerza del grupo era precisamente esa, la de ser un equipo, porque individualmente podemos ser menos que el contrario, pero como equipo podemos competir de igual a igual contra cualquiera. En las tres derrotas anteriores han jugado los 21 futbolistas de la plantilla. A mí me cuesta mucho tomar las decisiones, y creo que todos han tenido su protagonismo. No tenemos nada que hacer si nos vamos a pensamientos individuales, porque nosotros no tenemos a Messi”.
Abraham defiende las rotaciones, “porque como equipo podemos competir de igual a igual contra cualquier oponente”
Echarse las cuentas para la permanencia sirve de poco a estas alturas, y Abraham apuesta por el ‘partido a partido’, comenzando por el del próximo fin de semana ante el Talavera, “que tenemos que ir a ganar con todo lo que tengamos. Todos los equipos se están jugando algo, así que no podemos ir a pensar que el Talavera no se juega nada”. Pero el entrenador azulgrana tiene una fe ciega en su plantilla, “porque no todos se dejan el alma en el fútbol como lo hace este equipo”, y quiere que la afición también la tenga, “ya que si a la mínima dificultad te vienes abajo, no consigues nada”.
