El entrenador del Barcelona, Tito Vilanova, se declaró sorprendido por las declaraciones del técnico del Bayern de Múnich, Pep Guardiola, sobre que la junta directiva de Sandro Rosell usó su enfermedad para atacarle y afirmó que «no estuvo acertado» porque se ha sentido totalmente respaldado por los responsables del club.
«Sabéis que en todo momento he intentado evitar los temas personales. Creo que Pep no estuvo acertado y tengo que reconocer que me sorprendió. No creo que nadie de la junta me utilizara para atacarle. Tanto yo como mi familia estamos encantados con el trato», manifestó en su primera rueda de prensa de la pretemporada.
El técnico, que estuvo acompañado por el director deportivo de la entidad, Andoni Zubizarreta, destacó que durante su tratamiento de la enfermedad en Nueva York hubo gente que cogió un avión, en alusión a Rosell, para ir a visitarle, y lamentó no poder contar con el apoyo de su amigo Guardiola.
«Cuando estuve más de dos meses con el tratamiento no nos vimos. Él es mi amigo y creo que tenía que haber estado a mi lado. Si no nos vimos no fue por mí. Quien estaba solo y pasaba por un mal momento era yo. Son temas personales, pero como hablaron directamente de mí me he visto obligado a hacerlo, pero no centremos la rueda de prensa en esto».
Pese a ello, negó que haya mala relación entre ambos y recordó que fue el de Santpedor quien le animó a coger el relevo. «Nos conocemos desde hace 28 años, somos amigos, juntos hemos escrito una página imborrable del Barcelona, hemos ganado muchos títulos, por lo tanto, es mi amigo», se sinceró.
«Estos egos personales no interesan. La gente quiere ver si Messi mete goles. Ahora somos más débiles, ése es mi punto de vista», lamentó el preparador ‘culé’. Como contrapunto, precisó que si algún día Guardiola se presentara a presidente del Barcelona, le votaría sin dudar. «De momento que sepa no se ha presentado», señaló.
Y es que cree que este «ruido» les afecta. «En este club lo ha habido siempre, pero no nos beneficia. En este momento estamos más divididos, nos beneficia hablar de fútbol», reiteró.
Vilanova se refirió así a las manifestaciones de Pep Guardiola del pasado jueves, en las que atacó a la directiva de Sandro Rosell. «Que hagan su trabajo. Les deseo todos los éxitos del mundo porque una parte es culpa mía porque no hace falta que diga lo que significa este club para mí. Utilizar la enfermedad de Tito para hacerme daño, eso no lo olvidaré nunca», manifestó Guardiola.
En este sentido, el presidente también se declaró «sorprendido» por estas palabras. «Lo que dijo es totalmente falso. En la hemeroteca se puede comprobar lo que hemos dicho del mejor entrenador de la historia del club», aseguró Rosell en una entrevista.
Al margen de este polémico tema, Vilanova comentó, en referencia a la venta de Thiago al Bayern, que él quiere jugadores que busquen y deseen triunfar en el club blaugrana, y que, pese a que quería seguir contando con el centrocampista, acepta su marcha. «Competía contra Xavi, Cesc e Iniesta. Estos jugadores prácticamente no se han lesionado y él estuvo fuera 18 partidos. Quiero jugadores que quieran triunfar».
En este sentido, confesó que no le sabe mal que se lo haya llevado Guardiola, sino que se haya ido. «Le deseo que le vaya bien y tenga mucha suerte. Es un chaval que aprecio muchísimo. Intenté que se quedara, pero sabía la competencia que tenía, los mejores del mundo en esa posición, y son cuatro y solo pueden jugar dos».
Por todo ello, celebró que Cesc esté comprometido. «Se quiere quedar y triunfar. Sabe la competencia que tiene, pero me transmitió que su ilusión es quedarse», señaló.
Vilanova también destacó que le falta un central para completar la plantilla, ya que Sergi Roberto cubrirá la baja de Thiago. «No es verdad que haya dado solo un nombre. A Thiago Silva ya le queríamos, pero si no es él habrá otros», aseveró.
Por último, elogió a su homólogo en el Real Madrid, Carlo Ancelotti. «Es un gran entrenador, ha conquistado títulos en Inglaterra, Italia y Francia. Ganar a un entrenador como él que ha conseguido tanto es una motivación. Espero que su aportación sea muy buena para el fútbol español», concluyó.
Junto a Vilanova también estuvo Andoni Zubizarreta, que explicó que tanto el Barcelona como el Bayern están «contentos» por el traspaso de Thiago, y recalcó que el pase del mediocentro lo ve como «un desarrollo profesional» y no «como un negocio».
El directivo también tocó otros temas, como el precio pagado por el brasileño Neymar. «La operación es de extraordinaria contención. Al final hemos pagado 57 millones de euros», aclaró, mientras que sobre Villa, comentó que buscaron «una buena solución».
Finalmente, Zubizarreta señaló que Marquinhos «es interesante», pero que no hay «ninguna oferta» por él, sentenció.
