Con rostro algo cansado, pero rebosando alegría. Así se encontraba el alcalde de La Lastrilla pocos minutos antes de que Philippe Gilbert entrara victorioso por la línea de meta. Vicente Calle definió la experiencia de albergar un final de etapa de la Vuelta como algo “impresionante y maravilloso. En mi 60 años de vida no había vivido nada parecido, y eso que he compartido muchas Vueltas atendiendo a los ciclistas en Venta Magullo”.
El regidor destacó “el montaje que se lleva a cabo, con los 25 tráilers y los numerosos coches que llegaron una noche antes y se instalaron en La Lastrilla. Para el municipio ha sido una experiencia magnífica. Un día muy grande, que pasará a la historia de La Lastrilla. No puedo estar más feliz”.
“Desde la corporación municipal hemos trabajado mucho para traer este espectáculo a La Lastrilla, con la inestimable ayuda de la Diputación Provincial. Tampoco me quiero olvidar de los empleados del Ayuntamiento, voluntarios, Protección Civil de La Granja y San Cristóbal; ni, por supuesto, de los vecinos de La Lastrilla, que han tenido que sufrir los cortes de calles y la aglomeración”.
En cuanto a la imagen que ha dado La Lastrilla, Calle comentó que “siempre he apostado por la publicidad en el deporte, primero a través de mi empresa y ahora desde el Ayuntamiento. Por eso, el hecho de que el nombre de mi municipio esté trascendiendo fuera de nuestras fronteras, es muy importante, y es algo por lo que estar satisfecho. Este es el resultado de un trabajo muy duro, por lo que espero haber estado a la altura para los participantes, para la organización y para el público”, concluyó el alcalde.
