Viaje al más acá

Salí el miércoles de la semana pasada del Mutua Madrid Open con tiempo suficiente para llegar en hora al Metropolitano y ver al Atleti cumplir 120 años ante el Mallorca. El viaje en taxi, atascos de Madrid mediante, duró cerca de una hora y se me hizo eterno. Casi llego tarde.
Llegué al templo del fútbol mundial recibido por Juan Carlos Renedo, quien me invitó junto a sus amigos Quique Martín y Jesús Muñoz, ex-presidente de Unami, con entrada, bocata y viaje de vuelta a casa, junto a Melu, también ex-presidente de Unami, y María, quienes, como en la canción de Sabina, me dejaron en la puerta de mi casa. Pack completo.
El Atleti ganó el partido, naturalmente; pero al comienzo, en el recuerdo quedaba la derrota ante Osasuna el día que cumplimos 100 años. Y más cuando el Mallorca marcó el primer gol del partido. Quique Martín ya estaba, como buen colchonero, lamentando nuestra suerte. Incluso no las tenía todas consigo cuando salió al campo Kang-in Lee, ganando ya nuestro equipo 2-1. Sí, Kang-in Lee, una auténtica amenaza para cualquier equipo, sobre todo lanzando corners.
Ninguno sabíamos quién era Kang-in Lee, pero la expectativa, por las referencias de Quique, era grande. Después del partido, el jugador coreano fue declarado irónicamente por Juan Carlos Renedo como crack mundial, aunque esté en el banquillo del Mallorca. Después del 3-1 final y el homenaje a las leyendas del Atleti, volvimos a casa hablando del Balonmano Nava, de los managers en el tenis, de la singularidad de escuchar piragüismo por radio a las tantas de la mañana por culpa de David Llorente y, por supuesto, de Kang-in Lee, de quien el día siguiente me enteré que el Atleti se plantea su fichaje. No debemos dejar pasar la oportunidad de ficharlo.
El viaje hacia acá, a diferencia del de la Caja Mágica al Metropolitano, se me hizo tan corto que al llegar a la SG-20, pedí seguir hasta Valladolid. No me hicieron caso… así que habrá que repetir.