Decenas de miles de polacos llevaron ayer a cabo una gran manifestación en Varsovia, donde acusaron al Partido Ley y Justicia (PiS), de corte conservador y liderado por Jaroslaw Kaczynski, de tomar el poder el pasado año mediante la socavación de la democracia y de poner en riesgo el futuro de Polonia en Europa.
La multitud ocupó unos tres kilómetros a lo largo del bulevar ceremonial que da paso al palacio presidencial. Allí, la alcaldesa de Varsovia, Hanna Gronkiewicz-Waltz, miembro de la oposición y de la Plataforma Cívica (PO) señaló que el número de manifestantes alcanzaba las 200.000 personas.
Los críticos señalan que el Gobierno nacionalista está reprimiendo la democracia y creando una brecha entre el país y la Unión Europea, de la cual Polonia forma parte desde 2004. También exponen que el euroescepticismo del PiS podría empujar a Polonia, un antiguo satélite soviético, a una vuelta atrás hacia la esfera de influencia rusa. El líder de Plataforma Cívica, Grzegorz declaró a la multitud allí concentrada que se trataba de la mayor manifestación desde que Polonia abandonó el régimen comunista en 1989.
Algunas acciones del PiS, como los intentos de tener un control más directo sobre la judicatura y los medios de comunicación públicos, han hecho que la Comisión Europea lanzase un procedimiento legal que podría llevar a la suspensión de los derechos de voto de Polonia.
El PiS señaló que tiene que estrechar su influencia sobre las instituciones del estado para poder compartir los beneficios de la transformación económica más equiparadamente y que Polonia necesita defender sus intereses de forma asertiva.
Las manifestaciones contra el Gobierno son frecuentes, pero el PiS sigue gozando de un amplio apoyo popular. Una sondeo reciente señala que sostiene el 33% de los votos, sólo unos pocos puntos por debajo de lo que obtuvo en las elecciones de octubre y con una amplia ventaja con respecto al mayor partido de la oposición en el Parlamento, Plataforma Cívica.
La manifestación de ayer fue organizada por varios grupos pro europeos y por los partidos de la oposición, incluyendo al PO y al partido liberal, Nowoczesna, liderado por el economista del Banco Mundial, Ryszard Petru.
Los manifestantes portaron banderas polacas y de la Unión Europea y corearon “estamos y estaremos en Europa” para pedir al PiS respeto por los estándares de gobernanza de la Unión Europea.
“No respetando los valores europeos, el PiS está asegurándose de poner a Polonia en los bordes de la Unión Europea, para luego sacarla de ahí”, dijo a los manifestantes una portavoz de Nowoczesna, Kamila Gasiuk-Pihowicz.
“Sólo ha habido dos trenes que dejaron a Polonia en la estación histórica en la que ahora se encuentra. Uno es el ‘Express Europeo’, el otro es el ferrocarril Transiberiano”, señaló. El PiS lanzó un video donde el líder del partido, Jaroslaw Kaczynski, hermano gemelo del fallecido expresidente Lech Kaczynski, decía “hoy, estar en Europa significa estar en la Unión Europea”.
“Queremos ser miembros de la UE, porque queremos tener influencia en el destino de Europa. Pero nuestra posición depende sobre todo de nuestra fuerza. Debemos conseguir una posición fuerte y convertirnos en una nación europea fuerte”, concluía Kaczynski.
