El acuartelamiento de Baterías están las aulas de formación de los suboficiales de Artillerías y las aulas mecatrónica industrail, entre otras instalaciones en las que se imparten a los militares las clases necesarias para su profesionalización. Ayer, algunos de los alumnos estuvieron realizando prácticas con gases lacrimógenos, en una zona alejada de la ciudad, por lo que no debería haber pasado nada.
Sin embargo, según relataron los bomberos del Parque de Segovia, debido al viento, los gases lacrimógenos se extendieron y llegaron hasta el polígono El Cerro, donde cundió cierta alarma, al pensar los trabajadores que podía tratarse de un escape de gas. Por ello, llamaron a los bomberos, que se desplazaron hasta la zona industrial para comprobar lo que pasaba.
Finalmente, cuando se supo que el fuerte olor que se notaba en el polígono se debía al gas utilizado en las prácticas de los artilleros y que no había afectado a nadie, la zona industrial volvió a su actividad normal, aunque el susto siguió comentándose durante toda la jornada.
Fuego También tuvieron que acudir los bomberos de Segovia a sofocar un incendio declarado en una cocina particular, en concreto en una casa de la calle José Zorrilla, número 81. Explicaron desde el Parque de Segovia que la propietaria de la cocina afectada —se quemaron tanto la campana extractora como algunos muebles—, una señora de edad avanzada, tuvo que ser trasladada al Hospital General, afectada por la inhalación de humos. Asimismo, se desalojó al resto de los vecinos antes de proceder a ventilar el edificio, excepto a dos personas de movilidad reducida, cuya casa se encontraba libre de humo, según los bomberos.