Cerca de una treintena de voluntarios realizaron el pasado fin de semana una limpieza de basuras en un tramo del río Gudillos aledaño al apeadero de San Rafael, en un lugar emblemático para muchos vecinos de la localidad porque en esa zona se ubicaban las antiguas pozas que sirvieron de piscinas naturales para paliar los calores del verano no sólo de los residentes, también de muchos madrileños que en los años 60 y 70 acudían a pasar el día, utilizando como medio de transporte el tren, librándose también de los calores veraniegos madrileños.
Para la limpieza forestal se ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de El Espinar y su guardería forestal, con personal y material de Iberpistas y con la organización de Cruz Roja de Segovia.
En los cerca de 300 kilos recogidos en la limpieza de las márgenes del río —donde se podía acceder, porque en algunas zonas era imposible por haber vallas de instalaciones cercanas que se adentraban en el mismo cauce— se recogieron objetos tan ratos como una puerta de un vehículo o material eléctrico ferroviario y los habituales objetos como rueda o escombros.
En la actividad participaron vecinos voluntarios de diversas edades, pues acudieron desde niños a personas mayores que mostraron su concienciación por la limpieza del su entorno natural. El fin de la actividad no es sólo la limpieza en sí, sino y más importante, la concienciación para crear un caldo de cultivo de voluntariado que acuda a estas llamadas de colaboración ciudadana cuando sean requeridos, bien sea como en este caso la limpieza de un río u otros casos futuros que precisen la colaboración de numeroso personal.