Un encuentro con las raíces y los valores tradicionales del municipio. Eso es lo que se podría decir de las fiestas de la Virgen de la Inmaculada en Navas de Riofrío. Donde vecinos y personas con vínculos en la localidad, no faltan a la fecha, a una fiesta con caracter de época invernal, a las puertas de las navidades, que da al momento un caracter más intimo si cave.
Desde el Ayuntamiento año tras año, se va apostando por un programa más completo, donde se da cabida y participación a todos los sectores de población, en torno a música, talleres, gastronomía, cultura, con distintas actividades que se han ido sucediendo durante los cuatro días de celebración.
Por la carpa situada para la ocasión, han tenido cabida, un taller de juegos tradicionales, un taller de música, o una representación de teatro infantil, con la que se han hecho participes a los pequeños del sabor de esta fiesta tan familiar.
Por el escenario, también han pasado el taller cultural de Fuentepelayo, o la actuación del grupo de música country Clan Makeihan. Así, como por la noche, las actuaciones de una discomóvil.
El pasado lunes, día de la Virgen, se cerró el programa, con un reencuentro con tres de las connotaciones más importantes de la fiesta. La misa y procesión de la Inmaculada, oficiada por Rafael Polo; con la compañía del veterano grupo madrileño, Los Alegres y sus canciones de siempre, y una de las convocatorias más populares, la celebración del ‘Cocido Navillero’, elaborado por Julián del Barrio y su equipo.
