En una época en la que abundan por toda la provincia las llamadas ‘fiestas de recreación histórica’, Navalmanzano presenta este fin de semana (sábado día 31 de julio) la suya, que no pretende retrotraerse a Roma ni a la Edad Media, sino a una época mucho más cercana, la de nuestros abuelos.
La ‘Feria de Usos y Costumbres según nuestros Abuelos’, que nació con humildad hace ya nueve años, ha acabado por convertirse en uno de los acontecimientos del verano en Navalmanzano. Durante el transcurso de casi tres horas (de 19 a 22), la Plaza Mayor del pueblo y sus calles adyacentes ‘retrocederán’ 50 ó 100 años para servir de escenario a diversas representaciones de la vida cotidiana en tiempo de nuestros abuelos.
Algunas escenas se repiten año tras año. Otras no. Todo queda al albur de los vecinos, que a buen seguro presentarán múltiples sorpresas. En años precedentes, de repente se pudo ver un bautizo o una boda…Esta vez, quizá haya una Primera Comunión. Pero no se sabe.
De lo que sí hay certeza es de que los resineros, un oficio casi desaparecido, volverán a tomar las calles de Navalmanzano, como lo hacían antaño. En ellas coincidirán con vendimiadores, con hilanderas, con mujeres haciendo jabón… Además, se ofrecerá al público sopas de ajo, chicharrones rosquillas o chocolate. Y se podrá mojar el gaznate en una taberna de las de antes.
En total, cerca de 120 actores, todos ellos del pueblo, participarán en esta singular actividad, que contará también con un pequeño mercado, de una decena de puestos de artesanía, y de tres casetas promocionales (Mancomunidad Segovia Centro, CIT Tierra de Pinares y Proder Honorse). El alcalde de Navalmanzano, Miguel Ángel Olmos (PP), insistía ayer en que este pequeño mercado “es complementario”, advirtiendo con ello que “lo fundamental son las escenas que se representen”.
El regidor, que ayer quería agradecer “especialmente” la colaboración de la Obra Social de Caja Segovia en esta IX Feria, animaba “a toda la gente de la provincia” a dar una vuelta el sábado por Navalmanzano, no sin antes advertir que, en el caso de esta peculiar ‘fiesta de recreación histórica’ “nunca se ha pretendido que acudan miles y miles de personas”, ya que su filosofía “va por otros derroteros muy diferentes”.
Acabada la IX Feria, la organización invitará a cenar a todos los actores. Y, para concluir la jornada, tendrá lugar un certamen de dulzainas, denominado “Mar de Pinares”.