Un “revoltijo” entre el cuento, la guía de viaje y la novela histórica. Así define Ricardo A. Fernández su última creación, “Segovia para curiosos”, un compendio de anécdotas y curiosidades sobre el arte, la historia y las historias de la villa castellana. Se trata del tercer libro del escritor granjeño, muy diferente a los dos anteriores, que eran novela histórica. “Segovia para curiosos”, que el viernes fue presentado en la Librería Entrelibros, de la capital, y que ha sido editado por Derviche, son ocho “cuentecitos” peculiares, centrado cada uno de ellos en otros tantos puntos emblemático de la ciudad. “Porque Segovia es mucho más que el Acueducto y el Alcázar”, afirma el escritor. Y en este libro de 160 páginas hace un recorrido diferente por: las iglesias de los santos Justo y Pastor, San Martín y San Millán, la Sala del Cordón del Alcázar y su leyenda, el torreón de los Arias Dávila, la plaza del Conde Cheste y la singularidad de los tejados segovianos. “Cada cuentecillo —como explica Ricardo Fernández — narra una cosa específica, una curiosidad, del monumento, y cada uno lo cuenta un personaje”. El primero, el de la iglesia de los santos Justo y Pastor, se centra en lo que eran los teólogos, “responsables de los programas iconográficos de las iglesias, porque las iglesias no estaban pintadas al azar porque sí, sino que tenían un programa con ilustraciones de la Biblia, por ejemplo, de los apóstoles”. El referido a la iglesia de San Millán lo cuenta un cantero, “como uno de los miles que venían de Francia a trabajar en las iglesias segovianas, y habla de las curiosidades de este templo”.
Ricardo Fernández ha redescubierto Segovia con la elaboración de este libro, y entre las anécdotas que más le han llamado la atención, se encuentran las referidas a Pedro Arias Dávila y su “vida novelesca”. “Cuentan que al morir, estando en el entierro en Segovia, empezó a dar golpes en el ataud, se levantó y se marchó. Desde entonces siempre llevaba un amuleto con un ataud y todos los años conmemoraba su muerte con una misa de corpore in sepulto”, comenta el autor.
“Segovia para curiosos” es un libro “viajero” que el escritor granjeño recomienda leer recorriendo la capital al mismo tiempo, para sorprenderse con los numerosos secretos que guardan sus monumentos. Ricardo Fernández explica que tras muchos viajes por muchos sitios, tras escuchar a muchos guías buenos y malos, tras leer muchas guías también buenas y malas, “he observado que al final la gente no se queda con los reyes, ni con las fechas, ni con los estilos artísticos o los nombres de los elementos arquitectónicos, sino con las curiosidades, los chascarrillos y las anécdotas”. De eso trata su último libro, que ya se puede comprar en la mayoría de las librerías segovianas.
