Al menos diez personas han muerto y 18 han resultado heridas por la explosión este viernes de una bomba cerca de una mezquita al término de las oraciones de los fieles en la región de Orakzai, en el noroeste de Pakistán, según informaron fuentes oficiales.
La explosión tuvo lugar concretamente en Kalaya, la capital de la región semiautónoma, situada en el cinturón étnico pastún que recorre la cadena montañosa que sirve de frontera con Afganistán. Ningún grupo ha asumido de momento la responsabilidad del atentado en la localidad, que según el Gobierno estaba limpia de presencia talibán.
«La mayoría de los muertos y de los heridos volvían de las oraciones del viernes en la mezquita», según explicó el principal funcionario del Gobierno en la zona, Mehmud Aslam, quien recordó la gran operación militar iniciada por las fuerzas de seguridad paquistaníes para expulsar a las fuerzas talibán del lugar, que les servía de bastión y presunto lugar de residencia de su líder, Hakimulá Meshud.
