La fascinación de Emilia por la lectura de tipo realista en su juventud le ha llevado a adentrarse en el mundo de la novela policiaca, donde presenta a todos y cada uno de los personajes envueltos en diferentes tramas. La novela está cargada de intriga, suspense, secretos y crímenes, y a su vez muestra un final resuelto de una manera satisfactoria para el lector. ¡Los malos serán castigados!
Tras las publicaciones de sus tres “pequeñines”, como ella suele llamar a sus novelas, ha tenido bastante éxito a nivel internacional. Actualmente, se pueden adquirir en 11 países: España, México, Argentina, Costa Rica, Colombia, Perú, EE.UU, Canadá, Italia, Francia y Alemania.
Ha recibido buenas críticas al respecto y un buen número de ventas, así como de reconocimiento y prestigio a nivel cultural.
El pasado 9 de marzo ha recibido el premio de ‘La Mujer en la Cultura 2015’ en su ciudad natal, Zamora, donde el Teatro Principal acogía la tercera edición de los Premios ‘Eva’, que otorga anualmente la Asociación de Mujeres Zamoranas Empresarias (AZME). Horas antes, Emilia había sido la encargada de poner la voz al manifiesto institucional del Día Internacional de la Mujer Trabajadora.
Gracias a la exitosa presentación del libro ‘El hotel CollinGwöod’, el día 30 de marzo en Segovia, Emilia Casas muestra un agradecimiento a todos los que de verdad han sido partícipes en su interés por la novela policiaca y han aportado su grano de arena en toda su aventura literaria.
‘El hotel CollinGwöod’ es uno de los tantos casos que pueden ser guardados en un cajón o, por el contrario, abierto a buenas críticas y satisfacciones por parte del lector.
En el libro, la autora intenta reflejar casos reales resueltos a través de conclusiones sacadas de la psicología. Mezcla relatos británicos de la novela policiaca, cuyos protagonistas son personas de la clase social alta y, por lo tanto, dan lugar a crímenes un tanto ‘refinados’ y donde el culpable casi siempre es descubierto y castigado por la ley.
Emilia resalta los valores y cualidades de tres de los personajes que aparecen en la novela, como son el papel que juega el detective Smit como arquetipo de investigador cerebral por excelencia. Está cargado de contrastes. Sus procedimientos a seguir en las etapas de un caso son describir, explicar y probar un delito, así como verificar al autor y a su víctima mediante la observación y el razonamiento deductivo que tiene para resolver casos difíciles.
Como fiel compañero, el Sr. Parkhouse, quien aporta interesantísimas pistas para ayudar a resolver los casos.
Por último, el papel del inspector Lóan que aparece en diferentes situaciones, ocupando a veces el lugar de malo, debido a su envidia hacia el detective Smit.
En la reflexión que establece Emilia sobre este género alude al concepto de asesinato como un hecho que se da a día de hoy en todos los ambientes. “Cualquier persona tiene la capacidad de actuar de forma violenta aunque no lo lleve a la práctica, pero hay individuos mucho mejor preparados que otros para orientar la agresividad innata de nuestra especie, hacia la resolución de los problemas con los que se encuentran en la vida, o simplemente para conseguir metas que desean, y en este pensamiento creé al detective”.
