Una asociación privada, ‘Biota’, regalará hasta el próximo mes de julio de 2010 “entre 15 y 20 mastines” a otros tantos ganaderos segovianos que hayan solicitado un ejemplar para defenderse de los lobos. El regalo será posible gracias a una beca de Medio Ambiente (6.000 euros) concedida por Caja Segovia a los promotores de esta iniciativa.
La entidad adjudicataria de la beca pretende tomar el relevo del proyecto Life COEX, que durante cuatro años (2004-2008) intentó reducir los conflictos causados tanto por el oso pardo como por el lobo, promover medidas legales y socioeconómicas para conservar estas dos especies y mejorar su coexistencia con la sociedad rural.
A lo largo del tiempo que duró el proyecto Life COEX, sus responsables entregaron gratuitamente en Segovia un total de 24 mastines, previamente adquiridos en la comarca leonesa de Babia. Los ganaderos que recibían un ejemplar se comprometían a entregar dos cachorros de la primera camada.
Ahora, ‘Biota’ comprará cachorros a ganaderos a los que previamente regaló un ejemplar. “Queremos que se den cuenta de que pueden sacar una rentabilidad por los mastines”, explicó ayer la bióloga Yolanda Cortés. La beca de Medio Ambiente de Caja Segovia ha permitido, hasta la fecha, entregar seis. La cifra aumentará hasta la mencionada cifra de “15 ó 20”, siendo la próxima primavera la época en la que tendrá lugar un mayor número de donaciones, coincidiendo con los meses en los que ‘Biota’ espera un buen número de partos.
Los ganaderos interesados en recibir un cachorro pueden solicitarlo por correo electrónico (y_cortes@terra.es). En cuanto al adiestramiento de los mastines, Cortés ha anunciado la inminente aparición de un libro suyo, subvencionado por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, donde se explica cómo debe un ganadero ‘introducir’ a un mastín en un rebaño, de forma que pueda contribuir eficazmente a su protección.
“Los mastines no impiden los ataques, pero sí reducen de forma muy importante su número”, consideró Cortés, añadiendo que, en la provincia de Segovia, el proyecto Life COEX también impulsó “con unos resultados espectaculares” la instalación de vallas eléctricas para proteger al ganado, ya que en las explotaciones donde se colocaron dicha infraestructuras redujeron el número de ataques “en un 99%”.