Desde que hace siete años la Media Maratón “Ciudad de Segovia” apostara por los arcos del Acueducto como salida y llegada de su prueba, han sido numerosas las ocasiones en las que el monumento romano se ha convertido en el escenario que ha albergado numerosas pruebas deportivas, como la que ayer llevó a cerca de un millar de atletas a disputar/disfrutar de la Sanitas Marca Running Series, una iniciativa del diario deportivo de tirada nacional para fomentar (aún más) el atletismo popular.
A primerísima hora de la mañana comenzó el equipo organizativo a montar todo lo necesario para que a la carrera no la faltara de nada. Así, cuando todavía faltaban muchos minutos para el inicio de la carrera, y la avenida Fernández Ladreda comenzaba a poblarse de atletas calentando sus músculos, ya estaba todo preparado para que el periodista segoviano Alberto Castellanos, micrófono en mano, pudiera animar una nueva fiesta del atletismo popular en una espectacular mañana del domingo.
La peculiaridad de la prueba residía en que se daba a los atletas la posibilidad de realizar la prueba de cinco kilómetros, o la de diez, por un recorrido de lo más selectivo, que Segovia tiene calles de sobra para endurecer cualquier carrera a pie, con inicio y llegada en el Azoguejo. Así que en la línea de salida se presentaron varios cientos de atletas, en otra de las principales características que tiene el deporte segoviano, que cuenta con una amplia lista de deportistas populares que practican el atletismo casi a diario, y que suelen ser muy fieles a las pruebas que se celebran tanto en la capital como en la provincia.
En la primera línea de la salida, el alcalde (vestido de calle), junto con el concejal de Deportes (vestido de atleta) y los jugadores del Caja Segovia de fútbol sala (vestidos de chándal), que acompañaron a uno de los principales protagonistas de la mañana, Javier Guerra, que junto a su padre Paco recibió de nuevo el cariño de los segovianos. Javi podía haber dado la salida y quedarse esperando la llegada de los corredores, no en vano las distancias que recorre en sus entrenamientos preparatorios de la maratón son bastante mayores, y además se encuentra en pleno proceso de recuperación muscular del esfuerzo que supuso la maratón de La Coruña en la que logró el campeonato de España, pero el segoviano siempre está dispuesto a correr en su casa, y a ello se dispuso, recorriendo la distancia de cinco kilómetros por recomendación de su entrenador.
Eso sí, ver correr a Javi Guerra por las calles de Segovia es una auténtica gozada, porque devorar un kilómetro en poco más de tres minutos (lo que para él vendría a ser poco más de un entrenamiento) es algo que no está precisamente al alcance de cualquiera. De esta manera, Guerra llegó poco más de 15 minutos después de la salida a la línea de meta, y esperó a que llegara el segundo clasificado, Jesús Pardo, un minuto después, dando tiempo a otro buen atleta como es Víctor Corral, que acabó entrando en la tercera posición.
A partir de ese momento, la zona de llegada se convirtió, por un lado en zona de paso de los corredores que bajaban por la calle Real, y por el otro en línea de meta para los atletas de cinco kilómetros, amén de lugar de paso para los “sufridores” que apostaban por hacer de nuevo el recorrido.
En la categoría femenina, la lucha por la primera plaza en la prueba corta la protagonizaron Olga Torres y Carla Santaelena, decidiéndose el primer puesto en favor de Olga por una distancia inferior al medio minuto, con la incombustible Gema Gómez Santalea en la tercera plaza.
En la prueba de los diez kilómetros destacó otro segoviano, Pedro Luis Gómez Moreno, que en la jornada del sábado dominó en la carrera de Cantimpalos, y pocas horas después se pegó una buena paliza para ser el ganador de “La Sanitas” en la prueba larga. En féminas, Sonia de la Calle también ganó con claridad, un minuto por delante de Lola Chico. Al final, todos los atletas populares acabaron contentos, porque tuvieron la oportunidad de correr por las calles de Segovia, y la organización también terminó satisfecha, tanto por la respuesta de los deportistas, como por lo especial de una prueba por una ciudad que es todo historia.
