La jornada de San Ildefonso se vio interrumpida por la visita de la reina Letizia y los acompañantes de los mandatarios de cumbre de la OTAN. El día inició como todos los miércoles en el Real Sitio con el mercadillo, aunque los vecinos no tenían muy claro si hoy se iba a celebrar, por las estrictas restricciones de seguridad. Todo siguió como de costumbre, las personas a primera hora de la mañana haciendo la compra y otras salían a tomar café en la Plaza de los Dolores.
Desde muy pronto los encargados del Palacio estaban preparados para la llegada de la reina y de las primeras damas y caballeros de los líderes mundiales. Los habitantes de La Granja se acercan a la calle Alameda y a la plaza España para curiosear lo que estaba ocurriendo y poder saludar a alguna personalidad. Guardias civiles, ambulancias, helicópteros, seguridad secreta, controles y cortes de calles fue el panorama con el que se despertó más de un granjeño.
Sobre las 9:50 horas se dio la orden de “nadie pasa” por la Puerta de Segovia. Varios coches se quedan atrapados y forman una fila esperando poder pasar, pero viendo que pasaban los minutos y nadie aparecía, los conductores decidieron bajarse de sus vehículos para también presenciar la entrada de la comitiva.
Algunos turistas paraban a preguntar que sucedía porque no todos estaban enterados de la visita que se realizaba hoy en los jardines del Palacio y en La Real Fábrica.
Por desgracia al no saber de esta visita varios turistas vieron afectados sus planes. Una pareja de Gerona venía exclusivamente a visitar el Palacio y en la tarde disfrutar de la temporada de fuentes. “Estaremos solo dos días y hoy prácticamente perdimos el recorrido del palacio. Teníamos todo pago y nos encontramos con que hoy veremos entre poco y nada”, asegura Carmen González que llego en horas de la mañana al municipio.
Lo mismo les ocurrió a varios visitantes que venían de Burgos y Madrid, coinciden en que fue una lástima que nadie les avisara con anterioridad sobre la visita. Aunque, ni el turismo ni los eventos del Parador se vieron afectados, pero si tomó por sorpresa a muchos huéspedes.
La comitiva llega finalmente con un poco de retraso, se trasladaron en tres buses, con varios coches de seguridad siguiéndoles. Momentos después llega Jill Biden que por motivos de seguridad no viajó en tren. Los habitantes de La Granja a la espera de ver alguna cara familiar saludaban con emoción, pero los vidrios blindados de los vehículos no dejaban ver nada.
La reina Letizia como anfitriona esperaba desde unos momentos previos a la entrada de los jardines al resto de grupo para poder realizar la visita por la Fuente de Diana de La Granja. Posteriormente se pasaron al interior del Palacio para ver la exposición de tapices y el Dormitorio del Rey, donde tomaron café.
La segunda parada y donde más se aglomeraron las personas fue en La Real Fábrica. La visita de doña Letizia, Begoña Gómez y las primeras damas y caballeros no duro mucho en la Real Fábrica ya que les esperaba todavía su cita en Madrid en el Museo Reina Sofía.
Aun así, las personas empezaron a llegar a la travesía Puertas Nuevas para presenciar como pasaban las personalidades en sus vehículos.
Aunque a los vecinos de la zona les emociona la idea que se haya escogido el Real Sitio tenga su lugar en la Cumbre de la OTAN, les decepciono no poder ver ni saludar a la reina. “Nos hubiera gustado verles y no a los coches blindados, porque es tontería esperarles y no verlos”, manifiesta una vecina de La Granja. Otros apuntaban sobre la gran cantidad de calles cortadas y de seguridad para verles pasar “solo por un minuto”.
Sin embargo la alegría se notaba en las calles de La Granja y la emoción de las personas aunque sea salir un poco de la rutina y poder, de alguna forma presenciar las visitas de tan importantes personalidades como las que acudieron hoy.
