La XIV edición de la Media Maratón de Segovia ha pasado con nota su test de fidelidad. Más de un 85% de los atletas que se inscribieron en 2020 mantienen su dorsal para una carrera que se celebrará el domingo 27 de marzo, 742 días después de la fecha inicialmente prevista. Del cupo de 2.300 corredores apuntados entonces, unos 2.000 estarán en la salida. El resto de dorsales se han cubierto en las últimas semanas, así que el gran escaparate del atletismo segoviano volverá a brillar con luz propia con la resiliencia como lema: hay terminar lo empezado, cueste lo que cueste.
La Media Maratón vivió en primera línea el paro del país en la semana previa a la declaración del estado de alarma de 2020. La carrera estaba prevista el 15 de marzo, un día después de aquel Consejo de Ministros; la organización no suspendió el evento hasta el martes, un día después de los primeros cierres de colegios, con todo el material listo. Las camisetas de 2020 y las medallas por terminar la prueba han estado guardadas desde entonces. El año pasado, surcando olas epidemiológicas y con el proceso de vacunación en marcha, no hubo oportunidad. Lo que sí se renuevan son los dorsales, que volverán a imprimirse con la nueva numeración y fecha tras la baja de los atletas de 2020 y el alta de los nuevos.
La elección del día es siempre compleja, pues el calendario está plagado de eventos. “Es difícil encontrar fecha en Segovia con tanta actividad como hay. Hemos tenido en cuenta la Semana Santa, la Maratón de Madrid y no coincidir con fines de semana como el Domingo de Ramos o San José”, explica Javier Rincón, uno de los organizadores. Habrá una hora menos de descanso para los corredores, pues en la madrugada del sábado al domingo se adelanta la hora. Un hándicap para una noche en la que cuesta dormir.
La organización ha sido conservadora en sus estimaciones para no rebasar el cupo. La experiencia de otras pruebas indica que cerca de un 15% de los inscritos que mantiene su dorsal no termina acudiendo finalmente a la línea de salida. La incertidumbre sobre los ilustres que participarán se mantendrá hasta los últimos días; de momento, hay un atleta nacional que acredita una hora y siete minutos en los 21,097 kilómetros.
Otra tarea que ha tenido que hacer de cero la organización es constituir el ejército de voluntarios. La Policía Local exige un mínimo de 125 personas para cubrir la seguridad de la prueba; la cifra rozará los 400 para tareas como el montaje, la entrega de rosales, los avituallamientos o el ropero. Rincón agradece su labor: “Te pones en la piel de alguien que está tres horas parado en un cruce por un bocata y una camiseta”.
Las medidas sanitarias estarán también en el aire hasta el final. “No sabemos qué obligaciones vamos a tener que implementar ese día”. La Monumental y la Carrera de Fin de Año pidieron mascarilla en la salida para evitar riesgos en las aglomeraciones, un escenario que podría repetirse el día 27. Los participantes conocerán el próximo jueves a través de un correo electrónico esa información y qué servicios habrá en línea de meta. Por el momento, han mostrado su lealtad con la carrera. Aunque ante semejante esfuerzo, estar en la salida es solo el primer paso.
Se adelanta el tercer avituallamiento
La carrera contará con cuatro avituallamientos líquidos, más la bolsa del corredor, que se entregará en la meta. Habrá agua en vasos de cartón, evitando plásticos por razones ecológicas. El primer punto estará en San Lorenzo, en el kilómetro 5,5, al paso por el pub Celia. El segundo, en el kilómetro 10, en los jardines del Alcázar. El cambio viene en el tercero, que antes estaba en San Millán, al paso por el kilómetro 15, y ahora se adelantará al 13,5, en la plaza Doctor Laguna, junto a Correos. “Hemos atendido a la solicitud de muchos corredores; la parte más exigente es desde La Fuencisla hasta la Plaza Mayor”. Además, el cuarto punto es en la Plaza de José Zorilla, en el 17,5. Al retrasar este tercer punto, aleja el cuarto, que estaba algo próximo al anterior.
El viernes 25 hará la entrega del Miguelín, el premio al atleta popular segoviano, a José Llorente Palomo, conocido como ‘Cholo’, con una cena abierta en el Casares. El sábado 26 habrá un tributo a los dj’s de las discotecas segovianas de los años 80 en forma de pequeña verbena. El Sinodal de Aguilafuente viene este año como figurantes, hay varios grupos de dulzaineros, un grupo de rock -Desfase Rural- en la Calle Real y el grupo folclórico del Andrés Laguna, que estará en la Plaza Mayor. Habrá una sesión de estiramientos tras la carrera, a cargo de Paradita Yoga. Está en el aire el salto paracaidista, pero sí está confirmada la salida con la Academia de Artillería.
