La Gimnástica Segoviana ya conoce de primera mano los requisitos que debe cumplir el campo de La Albuera para convertirse en la sede de los partidos del conjunto azulgrana en la Primera RFEF. En la jornada de ayer, varios miembros de la Federación Española de Fútbol mantuvieron una reunión de trabajo con varios directivos del club azulgrana en el municipal para valorar estas condiciones, algunas más ‘negociables’ que otras, con el fin de que la Segoviana puede jugar los partidos en su campo, y no ‘exiliarse’ como han tenido que hacer otros conjuntos incluso de Segunda División por no cumplir con la normativa.
Más allá del aumento del aforo, con la instalación de gradas en los fondos para que quede un recinto cerrado, o el arreglo del terreno de juego cuyo césped deberá pasar una auditoría por parte de la empresa contratada por la RFEF para estos menesteres, hay una condición inexcusable para que La Albuera pueda acoger partidos de Primera RFEF, como es la mejora de la iluminación, elevando la potencia hasta los 600 luxes cuando ahora el municipal llega (a duras penas) a los 200.
Hasta la fecha la Segoviana, y el Unami y el Turégano cuando han jugado los partidos televisados de la Copa del Rey, han podido ir salvando mal que bien la situación, gracias a la buena voluntad por parte de todos los estamentos implicados, pero la realidad se impone, y los directivos de la Segoviana ya conocen de primera mano que el asunto de la iluminación no es negociable, puesto que en algún momento de la temporada se disputarán partidos en horario nocturno, y el operador televisivo tiene unas necesidades de iluminación para poder retransmitir el partido en unas condiciones aceptables. La pelota queda ahora en el lado del Ayuntamiento, que tendrá que acometer, y no será precisamente barato, puesto que estudios previos señalaron que la reforma integral de la iluminación del recinto deportivo podía ascender hasta los 800.000 euros.
