La Cofradía de la Esclavitud del Santo Cristo de la Cruz vivió ayer una jornada histórica al presentar públicamente el trono creado por el ebanista Ángel Martín para llevar la bella imagen del “Cristo de las faldillas” en procesión el próximo Jueves Santo con la fuerza de 18 portadores.
La cofradía quiso compartir la ceremonia de bendición del conjunto de andas con feligreses y vecinos del Cristo del Mercado, y su invitación fue masivamente aceptada ya que la ermita del barrio se llenó de público que se emocionó durante el acto.
Con la imagen del Santo Cristo de la Cruz expuesta ante el altar, el presidente de la cofradía, David Matarranz, se dirigió a los presentes para destacar el esfuerzo realizado por decenas de personas con el fin de hacer realidad, por fin, un sueño durante muchos años acariciado, y agradecer la colaboración de los ciudadanos que con sus aportaciones han contribuido a cubrir los costes de la compra del trono. También resaltó el trabajo de la cuadrilla de cargadores que llevará en sus hombros más de 500 kilos de peso el próximo jueves. Gracias a su colaboración, la Cofradía de la Esclavitud del Santo Cristo de la Cruz va a “romper esquemas” en la ciudad sobre los actos de Semana Santa, según destacó Matarranz. Explicó que el objetivo de adquirir un trono es mejorar el patrimonio de la Cofradía pero también el de la Semana Santa segoviana. Matarranz ensalzó la obra de arte creada por el imaginero artesano Angel Martín, y le hizo entrega de la medalla de la cofradía.
Acto seguido, el ebanista de Medina de Rioseco ofreció detalles del trabajo realizado en madera de cedro, que describió como unas verdaderas “andas segovianas”, cuya parte central está decorada con motivos del esgrafiado de la provincia y en los laterales del cajón aparecen las armas de la cofradía y de la Pasión. También precisó que se trata de un trono híbrido que puede ser llevado a hombros o por sistema mecánico como así ocurrirá en la procesión del Viernes Santo.
Finalmente, el sacerdote Antonio Sanz llevó a cabo la bendición del trono con seis varales. Muchos asistentes aprovecharon para fotografiarse ante la nueva obra de arte de la parroquia.
