Alrededor de un millar de personas (hasta 1.500 según los sindicatos, 300 de acuerdo con fuentes policiales) se movilizaron ayer, 1 de mayo, en la tradicional manifestación del Día del Trabajo, reclamando ‘Trabajo, dignidad y derechos’ y con la reforma laboral y los recortes económicos en eslóganes y pancartas.
La marcha, convocada conjuntamente por CCOO y UGT, partió pasadas las doce de la mañana del edificio sindical, en Fernández Ladreda, y desarrolló su recorrido por esta céntrica avenida hasta llegar al Azoguejo, para llegar, por la Calle Real, hasta la Plaza Mayor, donde se leyó el manifiesto.
En cabeza de la manifestación, una gran pancarta con el lema de la jornada, ‘Trabajo, dignidad, derechos’, portada por los principales representantes sindicales de la provincia, como el secretario provincial de CCOO, Ignacio Velasco; Luz Blanca Cosío, de UGT, y representantes de las distintas federaciones y secciones de ambas centrales. Junto a ellos, políticos como el diputado y secretario provincial del PSOE, Juan Luis Gordo; el senador Félix Montes; o los alcaldes de San Ildefonso, José Luis Vázquez; o Bernardos, Jesús Pastor.
A lo largo del recorrido, fueron muchos los eslóganes coreados, fundamentalmente en contra del Gobierno, contra la reforma laboral y los recortes y contra los banqueros, aunque tampoco faltaron las consignas de corte republicano y las referidas a la actitud de los trabajadores: “así, así, ni un paso atrás” o el clásico “viva la lucha de la clase obrera”.
Ya en la Plaza, Luz Blanca Cosío, de UGT puso voz al manifiesto, consensuado por ambos sindicatos y al que se dio lectura en toda España. El texto hacía hincapié en la situación, en muchos casos dramática que viven los más de cinco millones y medio de parados que hay en nuestro país, pero también en el recorte de derechos laborales y sociales del que las centrales sindicales acusan al Gobierno.
Así, el texto subraya que el primero de mayo de este año se caracteriza por la profundización de la crisis global; “tras casi cinco años desde el inicio de la crisis financiera, el fracaso de las políticas neoliberales aplicadas es un hecho incuestionable y con efectos dramáticos, al haber aumentado la destrucción de empleo, la pobreza y las desigualdades”.
“Ante la falta de regulación del sistema financiero, los ataques a la deuda soberana de los países, el empeoramiento de las condiciones de vida y trabajo, la disminución de la protección social y el deterioro de los servicios públicos, la Confederación Europea de Sindicatos responde con la movilización sindical, reclamando una salida social a la crisis, con otras políticas que impulsen el crecimiento económico y el empleo y preserven la cohesión social”.
Los sindicatos recordaron que Europa atraviesa “una gran crisis económica y social, con niveles récord de desempleo y caminando hacia un periodo de recesión general, que ya es una realidad en algunos países de la Unión. En la UE, a finales de 2011, eran más de 23 millones de hombres y mujeres los que carecían de empleo, entre ellos cinco millones de jóvenes, de los cuales 1.425 pertenecen a la provincia de Segovia y 26.263 pertenecen a Castilla y León”. Añaden que en los dos últimos años “estamos viviendo el más sistemático y generalizado ataque contra los derechos laborales y sociales desde el fin de la segunda guerra mundial”.
El manifiesto se mostró especialmente crítico con la reforma laboral aprobada por el Gobierno, que, en su opinión, “facilita y abarata el despido, precariza las nuevas contrataciones, desequilibra a favor de la empresa las relaciones laborales, aumenta la desigualdad y debilita la negociación colectiva y la función de las organizaciones sindicales”.
En esta línea, los sindicatos piden “una negociación para alcanzar un gran acuerdo nacional para la reactivación de la economía y la generación de empleo suficiente y de calidad, que consolide la igualdad de oportunidades y la lucha contra la discriminación como valores inherentes a la democracia y el estado social”.
