Un incendio registrado ayer por la tarde en la planta de transferencia de residuos sólidos urbanos de Los Huertos destruyó gran parte de los productos voluminosos que se encontraban despositados para su reciclado o transformación.
El valor de los daños no fue muy elevado, pero el abundante humo que se levantó causó una importante alarma, ya que la columna negra era visible a varios kilómetros de distancia, incluso desde la capital, situada a más de 16 kilómetros.
Hasta el lugar se desplazaron operarios de la empresa FCC así como varias dotaciones del parque de bomberos de Segovia, agentes de la Policía Local, y una patrulla de la Guardia Civil. También se personaron en el lugar la concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Segovia, Paloma Maroto, que llegó en un vehículo de la Policía Local, y el director de la planta, José Martín Sancho, entre otras autoridades.
Martín Sancho y Paloma Maroto explicaron que el fuego afectó a material de desecho procedente de los puntos limpios, y a un camión que se encontraba en las proximidades para recoger parte de los restos que se trituran en la zona. Además de viejos colchones se quemaron diversos enseres que son retirados de las calles a través de los puntos limpios móviles. Los bomberos consiguieron que las llamas no afectaran a la máquina trituradora que estaba remolcada por el camión, ni a una grúa de carga. También evitaron que se quemara el material de madera almacenado. El camión, que quedó compleetamente calcinado, pertenece a una empresa privada dedicada a la recogida de material para su reciclado.
Tras controlar las llamas los bomberos, con ayuda de las máquinas de la planta, los operarios depositaron tierra encima para intentar hacer desaparecer las llamas, pues el agua no logró sofocarlas por completo.
Por el momento se desconocen las causas que originaron el incendio. Tanto la empresa como efectivos de la Guardia Civil estuvieron inspeccionando las imágenes de las cámaras de seguridad para intentar encontrar los posibles motivos de las llamas.
En cuanto al resto de las instalaciones no se vieron afectadas por las llamas, por lo que podrán continuar trabajando normalmente. Aunque ayer apenas se registró viento, a diferencia de los días anteriores, sí se percibió un aumento de las temperaturas, por lo que tampoco se descarta que se produjera de forma accidental entre el propio material.