Tras varias semanas de reuniones y desacuerdos y justo el día después de que los sindicatos convocaran huelga general por la decisión del Gobierno de reformar unilateralmente el mercado laboral, el Consejo de Ministros dio luz verde ayer este controvertido documento, que, como grandes novedades a lo esperado, amplía los colectivos a los que se podrá aplicar el contrato de fomento del empleo estable y establece que el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) pague ocho días de las indemnizaciones por despido improcedente y objetivo. Además, facilita a las empresas con pérdidas despedir a sus trabajadores con 20 días de indemnización, algo que para CCOO y UGT «agrava» y «empeora aún más» lo que habían negociado con el Ejecutivo.
Éstas son tres de las modificaciones que el PSOE aprobó ayer en su documento definitivo de reforma laboral, que al tratarse de un real decreto ley entrará en vigor hoy, pero al que se podrán incorporar, posteriormente, mejoras en su trámite parlamentario, tal y como aceptó el propio Gabinete, de modo que los partidos puedan incluir sus aportaciones a través de la presentación de enmiendas.
Los cambios se han producido después de que el Gobierno haya celebrado una ronda de contactos con los grupos políticos para explicarles su borrador de reforma y pedirles que lo convaliden el martes 22 de junio en el Congreso de los Diputados.
El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, explicó que en el documento presentado a la oposición había algún colectivo al que no se podía aplicar el contrato de fomento del empleo estable, cuya indemnización por despido improcedente es de 33 días frente a los 45 de un fijo ordinario. Ahora se amplía a trabajadores de entre 31 y 44 años que hayan tenido un contrato estable y que hayan sido despedidos, algo que es de «justicia» y que con la actual legislación es «imposible», opinó Corbacho.
Con esta decisión se da una mayor oportunidad a las personas «atrapadas» en la temporalidad o los desempleados, consideró.
La intención del Ejecutivo es que el contrato de fomento del empleo estable «se use lo mas posible», destacó el titular de Trabajo, al tiempo que rechazó que esto suponga «universalizarlo» frente al fijo ordinario, que, precisó, mantiene sus derechos adquiridos, ya que el real decreto aprobado no tiene carácter retroactivo.
En cuanto a que el Fogasa financie ocho días de las indemnizaciones por despido, el ministro socialista indicó que también se amplía en el real decreto la cobertura. Así, el Fondo de Garantía Salarial se hará cargo de esos ocho días en las indemnizaciones por despido improcedente de los fijos ordinarios (45 días), de los de fomento del empleo estable (33 días) y de los colectivos por causas objetivas (20 días).
El borrador solo contemplaba la cobertura de los despidos del contrato de fomento estable, tanto procedentes como improcedentes.
Otra novedad apuntada por Corbacho es la que afecta a la contratación temporal. Al respecto, aclaró que el «único» contrato de carácter temporal que cambia su régimen jurídico es el de obra y servicios. De acuerdo con su explicación, lo que se modifica es la cuantía de su indemnización por despido, que de los ocho días actuales pasará a 12 en 2015.
En cuanto a las empresas de trabajo temporal, el ministro adelantó que en el real decreto se les levanta la restricción de operar en el sector de la Administración Pública.
Para Corbacho, la reforma es «sustancial» y es de las «más importantes que se han acometido en el país en los últimos años». «Es buena, ambiciosa, aborda los problemas y situará a la economía en la senda del crecimiento, del empleo y de la productividad», apostilló, tras indicar que la decisión tomada ayer «no tiene marcha atrás».
Sus objetivos -detalló- son tres: mejorar la productividad, dar mayor estabilidad en el empleo y dotar de más flexibilidad interna a a las empresas, «lo que no quiere decir más inseguridad».
De este modo, Corbacho confió en que, una vez tramitado el decreto ley en el Parlamento, se apruebe una «buena ley, la mejor ley», para que «no haya dudas» y la norma salga fortalecida. Recordó que esta reforma del mercado de trabajo responde al compromiso del presidente Zapatero de hacer cambios «estructurales» en la economía para modificar el modelo productivo y ser más competitivos.
Desde el Ejecutivo esperan que los grupos parlamentarios mejoren el decreto ley durante su tramitación porque afecta a temas importantes y debe tener eficacia en el tiempo y porque «la discusión siempre es buena». El ministro abogó por que la reforma laboral sea consensuada, al tiempo que ironizó al puntualizar que espera que no se impida su convalidación.
