Buen empate de la Gimnástica Segoviana en casa del Langreo al que le roba los dos primeros puntos de la temporada. Dorian, el jugador más desequilibrante del encuentro, adelantó a los langreanos tras un potente disparo que batió a Carmona. Mansour, que había fallado en el tanto local, se resarció de su error y de cabeza a la salida de un córner logró la igualada. Ambos conjuntos siguen en la zona alta de la tabla, algo que puede ser normal en el caso del Langreo, y que roza lo extraordinario para un recién ascendido como es el equipo azulgrana.
El encuentro comenzó vivo y con ambos equipos creando peligro rápidamente. A los tres minutos, los de casa tuvieron la primera oportunidad clara con un disparo de Dorian que el meta segoviano repelió evitando así el tanto del ecuatoguineano. El susto hizo saltar a Manu González, que pedía cabeza a sus defensas ante las facilidades que estaban dando. La réplica no se hizo esperar y en el minuto 11 el meta local Adrián Torre sería el que interviniese con excelentes reflejos para desviar un disparo de Borrego.
De la efervescencia, a la calma
Fueron momentos de lucha en el que cualquier pequeño matiz podría decantar el partido de uno u otro lado. Antes del cuarto de hora de disputa, Conde se convertía en el referente ofensivo segoviano con varias ocasiones en el área rival aunque ninguna llegaba a superar al meta. Pese a ello, la Gimnástica estaba viendo peligrar su integridad en el marcador ya que los langreanos estaban acercándose peligrosamente, bien comandados por Lavsamba.
Mediada la primera parte, el ímpetu visitante pareció frenar a los langreanos que decidieron mantenerse bien estructurados para contener a los segovianos, que con Conde y Nogueira estaban inquietando el área local. Nanclares también buscaba su hueco entre la zaga asturiana pero sin fortuna de cara a gol.
Mansour enmendó el error que cometió en el gol local, marcando su segundo tanto como azulgrana a la salida de un córner
Los últimos minutos de la primera parte fueron menos intensos que el inicio del partido y el conocerse ambos conjuntos impidió que las áreas fuesen pisadas con peligro real. Se marcharon camino de vestuarios comentando las jugadas del primer tiempo los jugadores, dejando todo abierto para la segunda mitad, que se inició comenzó con el Langreo perdonando el primer tanto cuando en el 51 Jandro habilitaba a Dorian que dejaba el balón franco para Jorge Hernández quien, teniendo solo que empujarla, envió el esférico por encima del larguero de Carmona. Con las manos en la cabeza quedaron los jugadores asturianos ante la ocasión tan clara desperdiciada.
Nanclares se mostraba activo entre líneas, pidiendo el balón, pero bien defendido apenas podía conectar. La Segoviana también gozó de una buena oportunidad un minuto después del regalo de Jorge Hernández cuando Rafa Llorente disparaba cruzado ante Adrián Torre.
El gol que lo acelera todo
En el minuto 58 llegaría el primer tanto del partido para el Langreo, tras un centro al área con un fallo en el salto de Mansour que se quedó corto y Dorian, el fuenlabreño, enganchando un disparo con la izquierda que fusilaba a Carmona.
El gol dio alas a los locales que casi sentencian en el minuto 62 cuando Ebea realizaba una gran jugada personal, cedía en velocidad a Dorian y su centro a Jandro lo remata el jugador local, pero el meta segoviano detenía con autoridad.
Era el momento de dar aire nuevo a la Gimnástica y Manu González decidió rotar el banquillo. Fran Adeva y de la Mata entraron por Manu y Nanclares. Había que dar un giro a una Segoviana que comenzaba a perderse en el juego langreano. No se mostró nada contento con lo que veía en el césped el entrenador visitante que hizo un triple cambio, dando entrada a Arribas, Rui y Borao.
El castigo por el perdón
En el 74 Dorian estrellaba en el larguero su disparo y que podría haber significado la sentencia. Pero el que perdona suele pagarlo en esto del balompié y así ocurrió. La Gimnástica Segoviana lograría el empate a balón parado, situación que está castigando a los langreanos esta temporada, y en un córner Mansour, que había fallado en el primer tanto del partido, sería el que se resarcía de cabeza batiendo a Adrián Torre. Empate celebrado por la parroquia segoviana que había buscado hasta entonces sin fortuna el tanto.
Hasta el último minuto Carmona tuvo que aparecer para evitar la victoria local. En el 88 Dorian la tuvo en un mano a mano con el portero de la Segoviana, pero los reflejos del éste impidieron el tanto desviando el esférico a saque de esquina. No hubo tiempo para más y el empate resultó definitivo.
