La Audiencia de Segovia ordenó la detención de A.M.B., un hombre que está acusado de tráfico de drogas y pertenencia a organización delictiva junto a otras cinco personas y que no acudió ayer al juicio, que quedó suspendido y se celebrará finalmente entre el 2 y el 3 de junio. La fiscal pide de manera provisional entre cuatro y seis años de cárcel y 1.500 euros de multa para once acusados de adquirir cocaína en Madrid y venderla en la localidad segoviana de Cantalejo en 2010.
Sin embargo, la fiscal mantiene a día de hoy la acusación solo contra seis hombres, de los cuales se han presentado todos -uno de ellos custodiado por la Policía porque ya está cumpliendo condena por otros hechos- a excepción de A.M.B., aunque se encuentra en paradero conocido, informa EFE.
La Sala celebró sin él las cuestiones previas del juicio, en las cuales la fiscal modificó sus conclusiones provisionales para pedir la misma pena para los seis acusados; tres años por el delito de tráfico de drogas y dos por el de pertenencia a una organización delictiva, todo ello con una atenuante de dilaciones indebidas.
Por su parte, todas las defensas pidieron la nulidad de las actuaciones porque consideran que las intervenciones telefónicas que la Guardia Civil realizó a los acusados y que han dado origen al proceso no estaban justificadas y vulneraban el derecho fundamental al secreto de las comunicaciones.
La Sala, tras deliberar, considera que las escuchas telefónicas son válidas al estar fundamentadas en unas investigaciones previas del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Guardia Civil. A continuación, la fiscal ofreció llegar a un acuerdo de conformidad con aquellos acusados que reconociesen los hechos, de forma que la condena por tráfico de drogas pasaría a ser de tres años a 18 meses de cárcel y la de pertenencia a organización delictiva, de dos años a cinco meses.
Después de un receso en el que los abogados valoraron esta opción con sus clientes, uno de los letrados manifestó a la Sala la voluntad de sus dos representados, que son hermanos, de acogerse a este acuerdo de conformidad.
A la hora de prestar declaración, el primero de ellos reconoció los hechos, pero el segundo se negó a declararse culpable: “¡Que se celebre, nunca he vendido droga, estoy cansado, no duermo ni nada, no estoy de acuerdo, se lo digo de corazón!”, exclamó en su turno de palabra. Como consecuencia, no hubo acuerdo de conformidad en ningún caso porque, como especificó el magistrado, los dos hermanos “van en el mismo paquete”, por lo que ambos serán juzgados junto al resto de acusados los próximos días 2 y 3 de junio.
Sobre el acusado que no se presentó, el presidente de la Sala ordenó su detención y pidió que fuera días antes del juicio, para garantizar su presencia ante el tribunal.
