Agentes de la Guardia Civil de Segovia detuvieron a tres personas en el marco de la operación AGEN, dos que actuaban como supervisor y jardinero, de nacional española y francesa, y una tercera en el momento en el que fue a colaborar en el proceso de recolección de los cogollos, como presuntas autoras de delitos contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico al desmantelar la “mayor” plantación interior de marihuana de 2024 en Castilla y León en la localidad de Turégano.
La citada operación derivó de una investigación que estaba realizando el grupo de información de Segovia por otros posibles hechos delictivos sobre uno de los detenidos. A raíz de ello, se realizaron diferentes vigilancias y seguimientos, tras los que se obtuvieron datos que le relacionarían directamente con una nave ganadera, sin actividad, ubicada a las afueras de la localidad segoviana.
Por este motivo, se dio traslado de la información al Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga perteneciente a la Unidad Orgánica de Policía Judicial, que comprobó que la nave había sido alquilada a principios de año por una persona que no tenía ninguna vinculación con el sector ganadero, estableciendo que su rol sería el de supervisión y financiación de la plantación.
De igual manera, se averiguó que en el interior de la nave vivía de manera permanente una segunda persona, sin domicilio conocido en España, que apenas abandonaba la nave, excepto para adquirir alimentos, estableciéndole el rol de lo que se conoce como jardinero, es decir, la persona que custodia, mantiene y cuida la plantación.
Finalmente, y ante diversos movimientos que evidenciaban que esas personas se estaban preparando para la poda y recolección de los cogollos, se decidió solicitar al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Sepúlveda la oportuna entrada y registro, que dio como resultado la aprehensión de un total de 1.600 plantas de marihuana en estado de floración, listas para su poda y posterior secado.
Instalación eléctrica
Los agentes destacaron el nivel de sofisticación de la plantación que disponía de una compleja instalación eléctrica que servía de soporte a todo el aparataje intervenido, constituido por los sistemas típicos para este tipo de cultivos, como son los de iluminación, extracción, control de climatología, secado, riego, así como fertilizantes y elementos para controlar la temperatura y humedad.
Así, los detenidos, junto a las diligencias policiales, fueron puestos a disposición de la autoridad judicial que dictaminó, para dos de ellos, el ingreso en prisión. En la operación también participaron componentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (Usecic) y el Servicio Cinológico de la Comandancia de Segovia.
