Ricardo de Andrés es un buen conocedor del fútbol, y por eso no es de los que vende la piel del oso antes de cazarlo. Aunque su nombre es el primero (y casi el único) de la lista de entrenadores futuribles para dirigir la próxima temporada al CD La Granja, el técnico segoviano prefiere no decir nada “porque no se puede hablar de algo que todavía no está hecho. Todos sabemos cómo se mueve el fútbol, y las vueltas que puede dar”.
“¿El CD La Granja? Ya sabemos todos las vueltas que puede
dar el fútbol, y no se puede hablar de algo que todavía
no está hecho”
De confirmarse finalmente su entrada al cuerpo técnico del CDF La Granja, Ricardo abandonaría el banquillo de la Gimnástica Segoviana juvenil, donde ha vivido una temporada con un inicio complicado “porque buena parte de nuestra plantilla estaba compuesta por jugadores de primer y segundo año de juvenil, con poca o nula experiencia en la categoría nacional, mientras que nuestros rivales contaban con muchos futbolistas de tercer año”, pero que poco a poco fue sonriendo al equipo gimnástico, “gracias al trabajo de los futbolistas, que hicieron un gran esfuerzo por adaptarse a la categoría.
La compleja edad juvenil
Y es que, aunque Ricardo considera que cada día de entrenamiento “es un aprendizaje no solo para los jugadores, sino también para los entrenadores, porque tienes que manejar un grupo de futbolistas que tiene un objetivo común, pero también aspiraciones individuales”, dirigir a una plantilla de deportistas en edad juvenil tiene su complicación añadida.
“Todos hemos pasado por esa edad, que es compleja”, asume Ricardo, que prosigue, “La responsabilidad de los estudios, la exigencia en casa, los amigos… si a todo ello le unimos en fútbol y más en una categoría nacional, es lógico que el jugador en ocasiones se vea muy bloqueado. Hay que saber manejar eso”. Y más cuando a alguno de ellos ya le comienzan a llamar los representantes “llenándoles aún más de pájaros la cabeza, porque los jugadores aspiran a llegar al fútbol profesional”.
Alguno de esos jugadores sorprende por su calidad “y en general el nivel de la Nacional Juvenil es muy alto en lo que a calidad técnica se refiere. Yo he visto jugadores preparadísimos, y comparándolos con los de mi generación, que éramos más ‘guerrilleros’ creo que son portentos técnicos. Pero el fútbol no es solo técnica, y para llegar lejos hacen falta otros condicionantes. Y la pasión por este deporte es uno de ellos” afirma el técnico.
Un atípico final de competición
Ricardo ha seguido la trayectoria de la Segoviana durante la temporada en Tercera División, “que estaba siendo espectacular en esta segunda vuelta, por lo que no era descabellado pensar en que podía alcanzar al Zamora, y más cuando el líder tenía varios jugadores sancionados. Seguro que se iba a llegar al tramo final de la temporada en un muy buen momento”. Pero llegó la crisis sanitaria “que nos ha hecho poner todas las cosas en un segundo plano”, y ahora hay que afrontar un final de la competición atípico, tanto que a mí no me gustaría estar en la piel de los jugadores que tienen que disputarlo”.
“Entiendo que hay clubes que se han invertido, pero… ¿qué garantías tienen los jugadores y sus familias en ese play off express?”
El técnico se explica: “Soy reacio a jugar esta competición, porque hay cosas mucho más importantes. Entiendo todo lo que significa este deporte para muchas personas, pero yo considero que el fútbol es algo prescindible, y aunque es evidente que hay clubes que han realizado una fuerte inversión en un proyecto deportivo, y han fichado jugadores… ¿qué garantías tienen estos jugadores y sus familias de que no va a suceder nada?”.
Por lo tanto, el segoviano considera que “no estaría mal” que la competición se diese por terminada “aun entendiendo que se produjeran algunas injusticias. Pero estamos ante una situación extraordinaria, que requiere de soluciones también extraordinarias y creo que todo el mundo entiende esto. Mientras exista un riesgo para la salud el deporte dejará de ser divertido para ser otra cosa, y yo creo que el fútbol debe ser también diversión”.
“El Campus puede esperar”
El Campus de fútbol ‘Ricardo y Roberto ‘ para niños que realiza todos los años junto a Roberto Álvarez se ha quedado en suspenso, a la espera de ver la evolución de los acontecimientos. “El Campus es una actividad bonita para los chicos, y no queremos que la vayan a hacer con el miedo al contagio” afirma Ricardo, que abre una puerta a la celebración del evento… pero sin un solo riesgo: “De momento esperaremos a ver lo que pasa, y si podemos hacerla en julio la haremos sin problema… pero si tenemos que esperar al año que viene porque continúan los riesgos, lo haremos. Ya habrá Campus otros años en los que los participantes solo tengan que preocuparse de pasarlo bien”.
