La Gimnástica Segoviana sigue imparable y ya suma doce victorias consecutivas. Ganó también en Ávila y remontando a un complicado rival, que se adelantó en el marcador. La inercia positiva en la que se encuentra inmerso el conjunto de Manu González hizo que empatara a través de Adeva, empatara con un gol de Diego del Castillo y se asegurara los tres puntos en el Adolfo Suárez con un tanto final de Diego Gómez (1-3).
Se abría el partido con un interesante intercambio de golpes e los que los segovianos tuvieron la oportunidad de lanzar el primer directo al rostro de los encarnados cuando Javi Borrego se quedó a un palmo –minuto 9– de rematarla en el área pequeña tras una rápida transición de los visitantes iniciada por la recuperación de Del Castillo y la asistencia de Calleja. Buscaba acelerar sus acciones el Real Ávila con los desmarques de Aitor, Ramiro , De Mesa y Moreira pero era el ritmo de los de Ricardo los que empezaba a imponerse a los locales, que sufran para sacar el balón de su campo cuando las lineas segovianas subían la presión.
Ya había avisado Adeva en los primeros minutos con un disparo que se marchó fuera, y volvió a avisar en una nueva carrera por banda y diagonal hacia dentro donde se fue de Carlos Pascual y se la hizo a Tena, que le paró en falta. Avisaba la Segoviana con Adeva, y la tuvo Borrego cuando buscó el mano a mano con Brian en una asistencia en largo pero su disparo precipitado lo atajó Brian.
Estaba el equipo de Ricardo desequilibrando el encuentro a su favor cuando Rubén Ramiro lo desequilibró de un plumazo. Perdió la marca Manu del encarnado, que no se lo pensó. Según controlo el saque en largo de Brian, la pegó. No se lo esperaba Carmona, que pese a su estirada veía cómo el esférico se colaba junto al palo. Golpeaba primero el Real Ávila –minuto 21– y parecía que la zozobra y la inquietud calaba en los huesos de los segovianos, que daba la sensación de estar sufriendo el luto de un marcador en contra poco habitual esta temporada entre los de La Albuera.
Si el gol le dio ánimos a los encarnados, rebajó el entusiasmo de los segovianos, que dieron un paso atrás. Sin embargo no hubo muchos espacios a las dudas, las que tardó de nuevo en aparecer Adeva, que estaba siendo una auténtica pesadilla para los locales. Conde se la acomodó para ponerla por alto a la espalda de los centrales. Fallaron los defensores como acertó el delantero segoviano en el control, maravilloso. La amansó en un palmo para picarla por encima de Brian, a media salida. Era el 1-1 antes de la media hora de partido. El partido se convertía en un vistoso intercambio de golpes en el que parecía más cómodo el equipo de Jimeno, que plantó un equipo de área a área.
Volvía el Real Ávila a buscar la vía rápida. Podía ser una contra por banda o un balón parado. Pero si tenía que llegar el peligro debía ser por Rubén Ramiro, que se perdió el partido ate el Burgos Promesas por un problema en el talón pero no se quiso perder el ‘clásico’. El ‘7’ le ponía un balón milimétrico en la cabeza a Aitor, que esperaba en el área pequeña. Se la entregó en las manos a Carmona, que aceptó el regalo. Y no tardaría en volver a tenerla –minuto 40– el Real Ávila esta vez de manos de Manu Moreira, que controló en la frontal el centro de Javi De Mesa, se fajó de Viti y la remató cruzada. Superó a Carmona, que estiró el pie como un portero de balonmano, pero el cuero se marchaba pegado al palo. Al borde del descanso el partido se aceleró para despedirse con un nuevo aviso de Adeva, que quiso poner la rúbrica a una gran acción de Conde, pero cuyo disparo se marchó alto.
Tras el paso por los vestuarios el Real Ávila saltó con ganas de morder. Si en la primera esperaba a los azulgranas, en la segunda les acosaba. Un par de minutos y un par de córners en el bolsillo de los de Jimeno, que veía la oportunidad de asestar a los segovianos la primera derrota de la temporada. No estaban cómodos los de Ricardo.
Estaba siendo Rubén Ramiro determinante para los encarnados y lo sería Brian cuando Calleja –minuto55– ponía un centro con precisión de cirujano para que Borrego rematara con la puntera y desviara a córner Brian cuando el segoviano ya se relamía por el gol. Impidió el segundo de los visitantes de primeras, pero no de segundas. Porque a saque de córner Del Castillo volaba por encima de Domingo, que ni amagó el salto, para colocarla al fondo de la red y poner el 1-2 (minuto 56).
Animaba Jimeno a los suyos, que seguían inquietando a Carmona a balón parado, pedía tranquilidad Ricardo, que sufría con cada una de las faltas que condecían los suyos a un Ávila con muchos centímetros. Se veía exigida una Segoviana que achicaba aguas ante un Real Ávila que amenazaba –impresionante la carrera por banda que dejó Aitor– pero no terminaba de morder. No movía ficha Jimeno, que no terminaba de encontrar la solución ni dentro ni fuera del césped a un partido que se le empezaba a escapar a los encarnados, que sonrieron cuando Brian salvaba el portero después de que Javi Borrego le hiciera un lío a todos y rematara al palo corto para que Brian desviara con apuros. Apenas un par de minutos después –minuto 79–detenía el duro remate de Gómez a un palmo de distancia.
Salvaba el tercero Brian y achicaba aguas la Segoviana, que no terminaba de aplacar los últimos intentos por los encarnados por obrar el empate. Se acercó Aitor –minuto 86– pero se elevó a destiempo a saque de córner. Sería la última acción del delantero, que se perdería los últimos minutos cuando Jimeno le retiraba entre el abucheo del público, que se quedó con las ganas de saborear el empate cuando Cristian tuvo en un mano a mano que lazó fuera el empate. Y del posible 2-2 al 1-3 de Gómez en una contra final para cerrar el partido y hundir los ánimos de los encarnados.
