El sector agroalimentario regional alcanzó en 2009 los 9.100 millones, cifra que supone un 14 por ciento más que el periodo anterior y que se debe, en su gran parte, a la puesta en marcha hace justo un año de la marca ‘Tierra de Sabor’, figura de calidad representativa de la Comunidad a la que han solicitado su adhesión 420 empresas -que engloban a 2.800 productos-, y que es conocida ya por seis de cada diez consumidores nacionales y la práctica totalidad de los ciudadanos de Castilla y León.
Así lo puso de manifiesto el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, que acudió ayer a la Feria Alimentaria de Barcelona en compañía de la consejera del ramo, Silvia Clemente, donde la Comunidad acude con cerca de 200 expositores en 3.000 metros cuadrados, la de mayor superficie, repartidos en los sectores de vino, lácteos, carne y otros productos más genéricos.
Además, añadió que con esa facturación la agroalimentación, agricultura y ganadería representan el 11 por ciento de la economía regional, una industria «poderosa» que da empleo a más de 38.000 personas en Castilla y León y que se constituye fundamental por pymes que realizan un «enorme» esfuerzo por su apertura al exterior.
En la visita a la ciudad Condal, el jefe del Ejecutivo autonómico realizó un balance del I Plan de Promoción y Comercialización 2008-2011, puesto en marcha hace dos años, y destacó que el agroalimentario es un sector que «da buenas noticias a la economía de Castilla y León», a pesar de la época de crisis que existe en el conjunto de la sociedad. Sin embargo, Herrera reconoció que los datos no son los que se había fijado la Junta al inicio del Plan y confió en que el 20 por ciento de la producción tenga una presencia en los mercados internacionales. En ese sentido, recordó que 2009 se cerró con 1.060 millones en exportaciones de los 9.100 totales, que significan un «enorme esfuerzo», después que en cinco años se haya crecido un 30 por ciento, aunque reiteró que ello todavía «no es suficiente», por lo que consideró prioritario la asistencia a la Feria Alimentaria, «para apoyar esta dimensión, el esfuerzo en innovación, competitividad y productividad y la salida al exterior».
También reconoció que se trata de un sector donde hay depositadas «grandes esperanzas e ilusiones», con enormes esfuerzos de inversión y con 3.200 empresarios en la Comunidad, «que es lo más importante», y que sitúan a Castilla y León como la tercera comunidad autónoma en producción final, después de Cataluña y Andalucía, y la segunda en inversión privada. Por ello, se prevé incrementar un 25 por ciento el valor de la producción bruta salida de fábrica, hasta superar los 10.000 millones.
El presidente de la Junta avanzó también que tienen como objetivo duplicar las exportaciones hasta los 1.900 millones, un aspecto que en la actualidad se sitúa en los 1.064 millones, lo que supone un incremento del 31 por ciento en los últimos cinco años.
También se pretende consolidar la imagen de calidad de los productos agroalimentarios, para que un mayor número de empresas se englobe en ‘Tierra de Sabor’, que en su escaso año de vida se equipara a marcas de otras comunidades autónomas con más de diez años de andadura gracias a las 420 empresas que han solicitado su adhesión.
Por otro lado, el jefe del Ejecutivo autonómico aprovechó la oportunidad de Alimentaria para ensalzar la labor que realizan los pequeños artesanos de la Comunidad. «Estamos hablando de los más pequeños entre los pequeños, pero que tienen la misma vocación, la misma apuesta por la calidad», comentó el presidente.
En este sentido, recordó que algo similar han puesto en marcha las cooperativas regionales, con el lanzamiento de la comercializadora ‘Tres Ces’, a través de la unificación de sus esfuerzos para la comercialización.