En la parrilla televisiva hay muchas horas dedicadas a programas del corazón, variedades, cotilleo etc., muchas personas dicen que es basura televisiva, pero mas de uno, que se suelen proclamar amantes de los documentales, o eso defienden, acaban viendo lo que tanto critican. He de reconocer que en muchas ocasiones no tienes donde elegir. Yo no soy muy fan de ellos pero en su defensa he de reconocer que cumplen su papel, que no es otro que el de entretener. Son los que más audiencia suelen tener sobre todo entre el público femenino , será por el formato, que me recuerda a mi infancia, a las charlas que tenían las mujeres en los patios de los pisos, hablando de los problemas de los demás, para así olvidarse de los suyos propios.
A la vera de estos programas han crecido cantidad de nuevos personajes, de fama efímera, pero mientras esta dura es de mucho provecho económico. Otros protagonistas de estos realities suelen ser hijos , hijas o respectivas parejas de estos ,que en realidad el único merito que tienen es haber nacido de una estrella. Puede que de ahí venga el refrán de “más vale nacer con estrella que no estrellado”. Puede que estos programas en realidad sean como un bálsamo medicinal que nos anestesia para olvidar todos los problemas que nos acarrean la propia vida.
