Ya están a la vuelta de la esquina las fiestas patronales de la villa. Fuentepelayo ya huele a diversión y algarabía después de dos años de obligado silencio. El Ayuntamiento de la localidad presentó hace unos días una amplia y variada programación festiva; y las peñas tienen dispuestas sus monumentales carrozas para el tradicional desfile. Las talanqueras para los encierros camperos llevan colocadas desde unos días y lo mismo acontece con el coso taurino en la Plaza Mayor. Solo queda el chupinazo que se dará mañana para dar por inauguradas las fiestas de Fuentepelayo.
Antes de que esto suceda, durante todo el estío se ha venido celebrando un ciclo denominado ‘Verano Cultural 2022’. El vecindario ha podido disfrutar de múltiples actividades musicales, deportivas, ecológicas, exposiciones y conferencias temáticas.
Y en un pueblo con tanta tradición teatral no podía faltar una representación escénica. Pues bien, como colofón a toda esta oferta cultural y educativa previa a las fiestas patronales, el Ayuntamiento facilitó la actuación del grupo teatral Con dos ó varios de la vecina localidad de Aldea Real. La Casa municipal de la Cultura reunió a un buen número de espectadores para ser testigos de una representación de la obra ‘Virgencita, que me quede como estoy’ (original del propio colectivo).
El grupo artístico de Aldea Real estuvo acompañado de sus simpatizantes, familiares y amigos de esa localidad, lo cual sirvió para ayudar al éxito cosechado.
La presentación oficial de la obra se hizo hace unas semanas en Fuente el Olmo de Íscar. Respecto a dicha actuación, hay que decir que en esta segunda se observó una importante mejoría en aspectos de la puesta en escena, los decorados y sobre todo, en el vestuario exhibido por el elenco.
Al finalizar la representación, con el público puesto en pie aplaudiendo a rabiar la obra que habían visto, los espectadores ya pusieron su mirada en la inmediatez de sus anheladas fiestas de toros y carrozas.
