La empresa Tauroemoción, que gestiona la actividad de la plaza de toros de Segovia este año tiene la gran responsabilidad de cumplir con las expectativas en taquilla durante las Ferias y Fiestas de San Juan y San Pedro.
La crisis económica, sumada a la escasa venta de entradas, dejó sin espectáculos taurinos el año 2014. Es por ello por lo que todo el quipo de Tauroemoción está tratando de fomentar entre todos los públicos la cultura y el arte del mundo del toro.
Alberto García, gerente de la empresa gestora, aseguró que ante la falta de financiación por parte del Ayuntamiento, su mayor y prácticamente única fuente de ingresos es la venta de entradas en taquilla. Para aumentar la afluencia de espectadores se están ofreciendo entradas para la corrida del día 28 a precios especiales, tanto a jóvenes menores de 25 años como a parados. En este caso, las personas que acrediten su DNI o la tarjeta del paro y cumplan con los requisitos podrán adquirir su entrada a 15 euros. Así mismo, el día 27, los niños menores de 5 años podrán acceder al Concurso Nacicional de Recortadores de forma gratuita. También se beneficiarán de esta oferta durante el espectáculo ecuestre del día 29.
Alberto García confesó que la corrida de toros estaba funcionando bien en taquilla, por lo que todo el equipo que está bajo su dirección espera cumplir con las expectativas. El empresario también quiso lanzar un mensaje reivindicativo a todos los aficionados de la tauromaquia de Segovia para que no pierdan la oportunidad de disfrutar del gran cartel de este año, ya que la plaza acogerá a toreros tan destacados como Miguel Abellán, Víctor Barrio o El Fandi.
Alberto García llegó a asegurar que “los toros forman parte del arte y la cultura de los segovianos”.
Reformas
La construcción de la plaza de toros de Segovia data de comienzos del siglo XIX y fue impulsada por la Sociedad Económica Segoviana de Amigos del País para celebrar en ella los eventos taurinos hasta entonces llevados a cabo en la Plaza Mayor.
Durante un siglo entero estuvo prácticamente en ruinas, según relatan algunas obras escritas en esa época. Y no será hasta bien entrado el siglo XX cuando se proceda a su reforma en profundidad. Casi a finales de ese mismo siglo, entre 1990 y 1995, se restaura y termina la Plaza de Toros de Segovia, quedado en las condiciones en las que hoy podemos contemplarla.
Recientemente se han realizado labores de acondicinamiento y remodelaje de la plaza de toros, centrándose sobre todo en la tribuna, en el graderío y en los burladeros, que muestran ahora un reluciente color rojo y el escudo de la ciudad.