El Barcelona logró ayer una trabajada victoria (0-2) ante un Mallorca que no supo aprovechar la superioridad numérica, tras la expulsión de Thiago, para igualar un choque que perdía desde la primera mitad. El triunfo permite a los ‘culés’ seguir soñando al no perder la estela del Real Madrid en la lucha por el título de Liga.
En un partido donde los primeros instantes fueron para los locales, el ‘Chori’ Castro sembró dudas en la zaga azulgrana. Un córner botado por el uruguayo, que fue rechazado para el propio extremo, y un mano a mano con Víctor Valdés, acabaron por animar a un conjunto balear que incomodó a un desdibujado Barça.
No obstante, con el paso de los minutos, los de Guardiola empezaron a hacerse con el control de la pelota, pero la presión bermellona les obligó a armarse de paciencia ante la imposibilidad de romper el muro local.
Pese a ello, la primera gran ocasión del encuentro llegó gracias a un fallo defensivo. Un balón peleado por Iniesta creó incertidumbre en la zaga local que entregó la pelota a Messi en la frontal, lo que permitió al argentino encarar a Aouate, pero el disparo impactó en la cara del portero. La réplica del Mallorca estuvo en la cabeza de Álvaro que, tras un gran pase de Pereira, pudo sorprender a Valdés, pero finalmente el lanzamiento se marchó rozando la escuadra.
En un partido tosco y lento, el Barça lo intentó pero no encontró esa fluidez y profundidad que le permitiera crear ocasiones claras. Así, en una jugada a balón parado, el conjunto de Guardiola metió el primero de la tarde. Una falta escorada botada por Messi se paseó por el interior del área sin que defensas y atacantes lograran atinar a tocarla. Aunque Alexis, libre de marca, pareció empujar el balón a la red en la misma línea de gol, el árbitro del encuentro concedió el tanto a ‘La Pulga’.
Con el marcador a favor, el asedio ‘culé’ fue más constante. Messi primero e Iniesta después dispusieron de sendas ocasiones para poner tierra de por medio antes del descanso. No obstante, fue Alexis el que estuvo más cerca de marcar. Un robo en la frontal del área bermellona permitió al chileno enfilar de cara a portería, pero su disparo acabó en el larguero.
Ya en la segunda mitad, fue el Mallorca el que de nuevo salió con más intención. Por su parte, el Barça prefirió jugar con la tranquilidad de tener el marcador a favor y no se acercó con demasiada velocidad a las inmediaciones del área de Aouate.
La lentitud del choque provocó la reacción de Caparrós, que introdujo dos cambios ofensivos. Tomer Hemed y Emilio Nsue salieron en detrimento de Álvaro y Chico. Con ello, en un internamiento bermellón se produjo la jugada polémica del choque.
Una pelota luchada por Thiago golpeó en el pecho del internacional español, pero el colegiado interpretó que se la llevó con la mano, por lo que le mostró tarjeta amarilla que sumada a la que ya tenía provocó su expulsión.
Con unos menos, el equipo de Guardiola dispuso de una nueva ocasión para aumentar la diferencia en el marcador. Una buena jugada de Alexis terminó con un remate de Messi casi a puerta vacía, pero el argentino marró el tiro.
Aprovechando la superioridad numérica, los locales empezaron a acercarse con más criterio a la portería de Valdés, pero no encontraron el hueco necesario para batir al portero internacional.
Así, con más ímpetu que juego lo intentó el cuadro balear, pero fue el Barça el que golpeó de nuevo. Una buena jugada colectiva terminó con un remate de ‘La Pulga’ al palo izquierdo de Aouate, que rebotó hacia el centro del área y le cayó a los pies de Piqué que solo tuvo que empujarla (0-2).
Con esta victoria, el Barça se mantiene segundo en la tabla con 69 puntos. Por contra, el Mallorca sigue en tierra de nadie en la clasificación al sumar 36. La próxima jornada, los culés recibirán la visita del Athletic mientras que los de Caparrós viajarán a Sevilla para medirse al conjunto de Nervión.
