La Guardia Civil detuvo a siete personas pertenecientes a dos grupos criminales, dentro de la denominada operación Zintat, y recuperó una tonelada de cobre del tendido telefónico, producto de más de un centenar de robos cometidos en Castilla-La Mancha, Madrid y Castilla y León. Además, otra persona es investigada como presunta receptadora de la mercancía robada.
Los agentes registraron una chatarrería en San Fernando de Henares (Madrid), donde se recuperaron una tonelada de cobre quemado procedente de los robos del tendido eléctrico y abundante documentación, según informaron fuentes de la Comandancia de Zamora.
La operación empezó en enero de 2022, cuando la Guardia Civil detectó un aumento de robos de cableado telefónico que afectó a unas 30 poblaciones de la provincia de Guadalajara, que provocó la interrupción temporal del servicio telefónico.
Las investigaciones permitieron detectar dos grupos criminales asentados en la comunidad de Madrid, que trabajaban de forma coordinada y con gran movilidad geográfica y que se dedicaban en exclusiva este tipo de robos. Los grupos perpetraron varios robos por semana en poblaciones de Madrid, Castilla-La Mancha y Castilla y León, en este último caso, en las provincias de Segovia, Valladolid, Palencia y Zamora.
Además, contaban con una red de receptadores a los que entregaban rápidamente la mercancía para su venta y adquirían coches y furgonetas de segunda mano que abandonaban después de los robos.
La Benemérita detuvo in fraganti a cuatro personas en Cerezo de Abajo (Segovia) mientras serraban varios postes del tendido telefónico. El segundo grupo fue desarticulado el pasado de mes de enero con la detención de otras tres personas, dos en Coslada (Madrid) y una, en Guadalajara.
Los presuntos ladrones serraban los postes telefónicos y, una vez en el suelo, seccionaban los cables en tramos de unos diez metros. Después, los quemaban en el campo, en zonas aisladas, para desprender la cubierta del cableado y poder vender el cobre en el mercado ilegal.
La operación Zintat, que fue desarrollada por la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Guadalajara y dirigida por el Juzgado de Instrucción número 2 de Guadalajara, permitió esclarecer más de 70 robos cometidos en la provincia de Guadalajara y 35 delitos más en las provincias de Madrid, Cuenca, Toledo, Segovia, Valladolid, Palencia y Zamora.
