El Camino de Santiago llegó ayer a Segovia en forma de exposición itinerante con la carpa «En el Corazón del Camino», situada en la Plaza de Artillería, junto al Acueducto. La muestra ha abierto sus puertas al público y podrá visitarse hasta mañana domingo. A la inauguración acudieron el alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes; el delegado de la Junta, Luciano Municio; y el concejal de Servicios Sociales, Andrés Torquemada.
«En el Corazón del Camino» es una iniciativa de carácter cultural que recorre las nueve capitales de Castilla y León desde el 10 de junio hasta el 8 de agosto. Con ella se pretende dar a conocer los Caminos de Santiago, difundir el patrimonio natural existente en Castilla y León, y sensibilizar a todas las edades sobre la discapacidad a través de talleres y gymkhanas.
Precisamente sobre la discapacidad se han desarrollado actividades dentro de la carpa como talleres de iniciación al Braille, impartido por la Once, gymkhanas con sillas de ruedas y bastones simulando uno de los tramos del Camino de Santiago, llamado «Camino a la integración».
La exposición «Los Caminos de Santiago y los espacios naturales en Castilla y León» pretende hacer un recorrido para descubrir los diferentes tramos que conforman el total del Camino.
Camino francés
Al entrar nos encontramos con el Camino Francés, que conforma una ruta de 750 kilómetros y que pasa por Burgos, Palencia y León; a continuación la exposición nos lleva por la Vía de la Plata, que une la Península Ibérica de norte a sur y comprende Salamanca, Zamora y León; seguimos viajando por el Camino de Madrid, en el que Segovia, Valladolid y León se convierten en protagonistas; la Ruta de la Lana, de Soria a Burgos, une esta materia prima de la Mancha con la capital burgalesa; seguimos viajando por el Camino de Levante y Sureste, que une el Mediterráneo con Santiago de Compostela; y, por último, finalizamos nuestro peregrinaje con el Camino castellano aragonés, que es el ramal realizado para llegar, vía Soria, hasta Santo Domingo de Silos.
Una de las invitadas a este proyecto ha sido la Fundación Padre Garralda «Horizontes Abiertos» que, de la mando de Laura Álvaro Fuentes, invita a que reflexionemos y nos acerquemos a las necesidades de los presos toxicómanos gracias al Proyecto Loyola. Desde 2003 se han realizado once caminos y tres rutas con actividades culturales, reuniones, dilemas morales y puesta en común de experiencias.
Una buena manera de mezclar conciencia social con el respeto a la naturaleza.
