Un año más, la interpretación del tradicional villancico, a la que se sumó en el trascoro de la Catedral un nutrido grupo de segovianos, fue ayer el momento más destacado de las celebraciones en honor de San Frutos, patrón de la capital. A las doce de la mañana, voces e instrumentistas, afinados en los ensayos de los últimos días, se sumaban, bajo la dirección del prefecto de Música de la Catedral, Alfonso María Frechel, para honrar al santo eremita.
Tras la Eucaristía, la celebración se trasladó a la Plaza Mayor, donde la Banda de la Unión Musical Segoviana, bajo la batuta de Héctor Guerrero, interpretaba una variada selección de piezas, desde música de películas a los populares pasodobles, sin olvidar, en una fecha tan segoviana, las jotas. A pocos metros, en una mañana soleada aunque fría, numerosos ciudadanos contemplaban las setas y hongos expuestos ante el Ayuntamiento por la Sociedad Micológica Segoviana.
Tras el concierto, el jefe de sección de EL ADELANTADO DE SEGOVIA Marcelo Galindo cumplió el encargo que le encomendó la Venerable Cofradía del Paso de la Hoja, dando lectura al Romance de San Frutos, en el que da cuenta de la vida del Santo desde su infancia, su retiro en el cenobio del Duratón, su especial relación con los pájaros y el milagro de salvar a las gentes de la zona de la invasión de los moros.
A continuación Carla Muñoz Ruiz, violonchelista y reconocida por la Venerable Cofradía por su “simpatía, bondad y amor a la música y las tradiciones”, se convirtió en la primera mujer en ser nombrada ‘amiga de San Frutos’, un reconocimiento acompañado por la entrega de una estatuilla del Santo realizada en el taller de Ignacio Sanz, que también se le entregó a Marcelo Galindo.
Carla Muñoz señaló sentirse “muy honrada por este reconocimiento, sobre todo porque hay muchas personas, entre ellas muchas mujeres, que también se lo merecen”. También subrayó su satisfacción por ser la primera mujer en recibir la distinción, “y espero y deseo no ser la última”.
La jornada se cerró, pasadas ya las dos de la tarde, con la interpretación del Himno a Segovia, al que se unieron espontáneamente muchos segovianos, no sin antes una pequeña sorpresa para el alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, que ayer celebraba su cumpleaños: la Banda de la Unión Musical quiso interpretar para él el cumpleaños feliz, al que también sumaron sus voces numerosos ciudadanos.
